En la segunda edición del Congreso Ingenia, que tuvo lugar del 22 al 25 de febrero, en el ITESO contó con conferencias, talleres y la primera edición del Hack to Solve.
En las escuelas, sobre todo en las universidades, los alumnos pasan el tiempo conociendo el pasado para tratar de entender el presente. Pero para Roberto Aldaba, lo verdaderamente importante tendría que ser responder una pregunta: “¿Qué sigue?”. Con esa pregunta arrancó el pasado jueves Ingenia 2.0, congreso de tecnología e innovación con sede en el ITESO, y que en su segunda edición incluyó, además de conferencias y talleres, la primera edición del Hack to Solve, actividad que se realizó durante el fin de semana y que tuvo por objetivo encontrar soluciones tecnológicas para problemas relacionados con la soberanía alimentaria y el acceso equitativo a la educación.
Roberto Aldaba es parte del equipo de desarrolladores de herramientas para trabajar en la nube de Microsoft. Para la conferencia inaugural, titulada “El fenómeno de la transformación digital (y cómo ser parte de ella)”, compartió el estrado del Auditorio D1 con sus colegas Carmen Glynn y José Tapia, todos ellos trabajan en Microsoft.
En su intervención, Aldaba invitó a los asistentes —muchos de los cuales escuchaban con sus laptops abiertas sobre los muslos— a tener “el hábito de preguntarse y tratar de responder qué sigue”, así como a estar siempre “atentos a las cosas que no funcionan adecuadamente para encontrar los huecos y así innovar y mejorar”. A manera de consejos, invitó al auditorio a ser auténticos, rodearse de gente más inteligente, especializarse, comprender los problemas, actualizarse permanentemente, tener mentores que los guíen y, sobre todo, disfrutar su trabajo. Cerró preguntando: “¿Tú qué harás hoy para descubrir qué sigue?”.
En su intervención, José Tapia hizo hincapié en la importancia de aprender a trabajar combinando diferentes disciplinas. “El tema multidisciplinario hoy en día es muy importante”, afirmó, y luego añadió que en el tema de la innovación no sólo hay que responder a la pregunta de qué hacer sino tener claro el por qué se hacen las cosas.
Por su parte, Carmen Glynn compartió con los alumnos y profesores su vivencia de la evolución de la tecnología y dijo a los alumnos que ellos el reto ahora consistía, sobre todo, en “saber qué hacer con tanta información. Espero grandes cosas de ustedes”.
Previo a la conferencia a cargo del equipo de representantes de Microsoft, tuvo lugar la inauguración oficial de Ingenia 2.0, que estuvo a cargo de Catalina Morfín, titular de la Dirección General Académica del ITESO, quien comenzó felicitando a las cuatro carreras del Departamento de Electrónica, Sistemas e Informática —las ingenierías en Electrónica, Sistemas Computacionales, Seguridad Informática y Redes, y en Empresas de Servicio— por la realización del congreso.
Señaló que el congreso se apegaba a los rasgos y características de la propuesta educativa del ITESO, a saber: “Hacer de los estudiantes los principales actores; la creación de conocimiento interdisciplinario a partir del trabajo colaborativo para encontrar soluciones a problemáticas sociales; la búsqueda permanente de la innovación”.
Catalina Morfín señaló que en México hay un déficit de ingenieros, “pero no de cualquier tipo de ingeniero. Se necesitan profesionistas que tengan conciencia social y que busquen innovar para lograr una sociedad más justa y más humana”.