Eckart Brödermann, abogado internacional y profesor de la Universidad de Hamburgo, presentó ante estudiantes, docentes y especialistas jurídicos los fundamentos y aplicaciones de los Principios UNIDROIT, una herramienta clave en los procesos comerciales internacionales

El derecho es como una casa, cuyos rincones son estudiados de forma minuciosa por los abogados: sus puertas, ventanas y estructuras. Así como los arquitectos saben que existen muchos tipos de casas, sin importar cuán distintas sean: Lo mismo ocurre con los sistemas jurídicos. “De la misma manera, tu código civil mexicano, como mi código alemán, es simplemente una de las muchas ‘casas’ posibles para regular la contratación civil”, comparó el jurista alemán Eckart Brödermann, especialista en derecho internacional privado.

Esta declaración se dio durante la conferencia “Principios de UNIDROIT”, impartida en el ITESO, en el marco de la edición número 67 del Congreso Anual de la Unión Internacional de Abogados (UIA), una organización fundada en 1927 que reúne a profesionales del derecho de más de 110 países. El evento se celebró por segunda vez en México, con Guadalajara como sede.

Brödermann habló sobre los retos que enfrentan los contratos internacionales debido a las diferencias entre los sistemas jurídicos de cada país. Los marcos económicos, políticos, reglas comerciales, tasas de cambio e incluso las monedas que varían entre las naciones. Todo lo anterior representa un desafío al momento de importar, exportar y formalizar acuerdos. Además, estos procesos están atravesados por la cultura y la historia de cada región.

Con el objetivo de fomentar la cooperación jurídica internacional y promover la armonización del derecho privado, se crearon los Principios del Instituto Internacional para la Unificación del Derecho Privado (UNIDROIT), cuya versión más reciente fue publicada en 2016. El instituto fue fundado en 1926 como parte de la Sociedad de las Naciones (SDN), con sede en Roma.

Brödermann participó como observador oficial en el grupo de trabajo que desarrolló estos principios entre 2004 y 2012. Además, es autor del libro Principios UNIDROIT sobre los contratos comerciales internacionales. Comentario artículo por artículo, que analiza los 211 artículos que componen el documento.

El jurista destacó que este instrumento representa una lex mercatoria moderna, es decir, un conjunto de reglas neutrales, universales y eficientes que permiten a las partes negociar contratos sin someterse a las leyes de cada país involucrado. Las ventajas que ofrecen incluyen neutralidad, claridad, compatibilidad cultural y reducción de riesgos legales. Además, permiten una interpretación más justa, flexible en casos de fuerza mayor, incumplimientos o renegociaciones

“Siempre que tengo estudiantes extranjeros, les dejo como tarea comparar su propia legislación con los Principios […]  Es fascinante ver […] que son bastante similares a lo que existe en sus propias leyes”, compartió Brödermann.

Durante la conferencia también se abordó el contexto mexicano, especialmente tras la reforma constitucional de 2024, que ha generado múltiples cuestionamientos hacia el sistema judicial. Guillermo Gatt Corona, presidente del ITESO, AC, y moderador del encuentro, señaló que el arbitraje internacional, combinado con los Principios UNIDROIT, puede ser una vía para resolver disputas comerciales: “Tal vez muchos de nosotros tenemos menos confianza en los tribunales debido a esta reforma. Y una de las grandes ventajas del arbitraje es precisamente que no tienes que depender de esos tribunales, sino de árbitros neutrales y especializados”, afirmó. 

Finalmente, el Brödermann hizo un llamado a las universidades mexicanas para formar abogados con visión internacional, capaces de entender y aplicar herramientas como los Principios UNIDROIT y el arbitraje: “Hay una creciente aceptación de los principios UNIDROIT como un sistema jurídico independiente de derecho contractual transnacional, y no solo como una recopilación de principios y reglas individuales […] Esto será el futuro, al menos eso es lo que yo creo”.

 

FOTO: Zyan André