Más de 6 mil 500 personas, entre estudiantes y personal del ITESO, participaron en un simulacro de emergencia en el que se usaron las nuevas alarmas del campus.
El jueves 31 de octubre, en las instalaciones del ITESO se registraron dos incendios, una amenaza de fuga de gas en la cafetería central, y una alumna que estaba entre los escombros de la Biblioteca Dr. Jorge Villalobos Padilla S.J. con una fractura de cráneo provocada por el derrumbe de cubículos; hubo una segunda víctima, en el mismo lugar, que sufrió un paro cardiaco.
Advertencia: todo lo anterior fue una elaborada simulación. Estos falsos accidentes formaron parte del ensayo de evacuación que semestre con semestre realiza la Universidad Jesuita de Guadalajara por razones de seguridad. A diferencia de los ejercicios anteriores, en esta ocasión se utilizaron las nuevas alarmas que se instalaron en los edificios Ñ y D, que tienen una resonancia de 106 decibeles, capaz de cubrir el campus entero.
Mientras miles de estudiantes se apresuraron a buscar las zonas seguras más cercanas, el comité de Protección Civil del ITESO tuvo su propia prueba contra la adversidad, en una serie de eventualidades ficticias que fueron planeadas para evaluar su coordinación y capacidad de respuesta ante una contingencia.
“La hipótesis de la evacuación fue un sismo de 7.8 en la escala local en las costas de Jalisco”, explicó Raúl Castillo, coordinador del comité de Protección Civil. “Simulamos que este sismo nos generó algunas situaciones de contingencia en el ITESO. Tuvimos dos focos de incendio en el edificio Q5, una fuga de gas en la cafetería central y dos lesionados que no lograron salir por sus propios medios en biblioteca.
“Eso nos obligó a activar las cuatro brigadas básicas de protección civil: la de combate de incendios, otra fue la de búsqueda y rescate, la de comunicaciones y la de primeros auxilios. Cada brigada tuvo una función para atender las contingencias que simulamos”.
Mientras la brigada de combate de incendios se dividió para atender las dos llamadas casi simultáneas de fuego y fuga de gas, y que el equipo de búsqueda y rescate localizó a las falsas lesionadas en la biblioteca, un total de 4 mil 150 alumnos y 2 mil 380 empleados suspendieron sus actividades para llegar a sus zonas seguras designadas. El tiempo promedio de los 25 edificios en la evacuación de las 12:00 fue de 2.11 minutos; el edificio con menor tiempo fue el L, con 45 segundos, y los más lentos en evacuar fueron los edificios W, X e Y, con 4 minutos.
“El tiempo ideal de evacuación en caso de contingencia depende de las dimensiones del edificio, de los niveles y de las personas que lo habiten en ese momento”, dijo Raúl Castillo, “pero, en promedio, en un edificio de cuatro a cinco niveles, (la evacuación) no debe tardar más de cuatro minutos. En los edificios del ITESO, si tardamos más de ese tiempo, estamos un poquito fuera de la norma de desalojo de un edificio”.
Las nuevas alarmas cuentan con sirenas que responden a diferentes tipos de contingencias; las que sonaron el jueves 31 de octubre corresponden a la alarma de desalojo para dirigirse a zonas de seguridad; la segunda en sonar, al final del simulacro, está designada para avisar que la situación de emergencia terminó y es posible reanudar las actividades.
Próximamente, se realizarán prácticas para los otros dos tipos de contingencias que prevén las nuevas sirenas: la alarma de confinamiento, en caso de tiroteo o riesgo en el exterior, y la alarma de repliegue, en la que se deberá salir de los edificios y concentrarse en una de las dos grandes zonas de la parte sur del ITESO: la cancha de beisbol bajo el domo, y la zona entre el edificio central y Servicios Generales.
El primer simulacro, que se realizó a las 12:00 horas, fue exitoso en tiempo y presentó los retos que tiene la institución para preservar la seguridad de estudiantes y personal en caso de contingencia. El segundo simulacro estaba programado a las 17:00 pero fue suspendido por la lluvia.
Para más información acerca de las zonas seguras en caso de contingencia y datos adicionales, escribe a seguridad@iteso.mx o marca a la extensión 3361.
Foto Luis Ponciano