El turismo sustentable, la economía solidaria y la identificación de mejores formas de hacer networking fueron algunos de los temas que se pusieron al alcance de los estudiantes de la Royal Roads University, de Canadá, en su reciente paso por el ITESO
Por Daniel Medina Jackson
Desde 2017, el ITESO tiene una alianza con la Royal Roads University (RRU) en Victoria, capital de Columbia Británica, en Canadá, y como parte de ésta se ha colaborado en una diversidad de proyectos académicos desde la coordinación de la carrera de Hospitalidad y Turismo y la Oficina de Internacionalización. Recientemente, estudiantes de varias carreras participaron en un Proyecto de Aplicación Profesional (PAP) enfocado en el desarrollo y la consolidación de la nueva ruta de la raicilla como producto turístico en el municipio de Atenguillo, Jalisco. El trabajo del PAP, en el que intervienen alumnos de Publicidad y Comunicación Estratégica, Administración de Empresas y Emprendimiento, Comercio y Negocios Globales y Hospitalidad y Turismo, se hizo merecedor al Premio 2022 al «Programa Sobresaliente en Educación Internacional» que otorga la BCCIE, un organismo conformado por representantes de entidades públicas y privadas de la provincia canadiense, cuya misión es fomentar modelos de educación intercultural.
En pro de continuar y fortalecer este vínculo, del 10 al 15 de enero pasados, Alfredo Brambila y Eugene Thomlinson, responsables del programa académico de Hospitalidad y Turismo del ITESO y de Royal Roads, respectivamente, realizaron un viaje por Nayarit y Jalisco con un grupo de estudiantes provenientes de la universidad canadiense. El objetivo fue pilotear un modelo pedagógico de viaje académico que permita que los estudiantes integren una perspectiva más amplia sobre el turismo regional a través de la convivencia y el aprendizaje situado. “El concepto de los PAP nos ha parecido un modelo de trabajo académico muy valioso, y aunque no lo podemos aplicar igual, estamos explorando diversos mecanismos, a través de la colaboración con el ITESO, para que nuestros estudiantes obtengan mayor aprendizaje empírico”, señaló Thomlinson.
El viaje inició en Nayarit, en la playa Platanitos, a 25 kilómetros al sur de San Blas. Ahí se encuentra un campamento tortuguero que es Área Natural Protegida por el Gobierno Federal. Se trata de uno de 185 que se encuentran en el país, y su objetivo es preservar ecosistemas frágiles y asegurar el equilibrio y la continuidad a los procesos evolutivos y ecológicos. “Lo que pudimos experimentar en este lugar es una combinación entre turismo de naturaleza, ecoturismo y turismo de voluntariado, con la que podemos llevar al estudiante a una reflexión sobre cada tema y a entender el impacto favorable de trabajar y convivir con la misma comunidad”, mencionó Brambila. El grupo de profesores y estudiantes se involucró por unos días en la limpieza de la zona y los nidos, así como en el patrullaje nocturno para recuperar los huevos y los cuidados necesarios para garantizar la incubación y finalmente la liberación de las crías.
La siguiente parada en el viaje fue Guadalajara, donde se hizo un recorrido por el Centro Histórico: el Instituto Cultural Cabañas, el Mercado de San Juan de Dios, la Catedral, el Palacio de Gobierno, la Plaza de Armas y la Arena Coliseo, donde asistieron a un espectáculo de lucha libre. “Los estudiantes se sensibilizaron mucho con respecto al valor de nuestra ciudad. La verdad, no se imaginaban el patrimonio gastronómico, arquitectónico, histórico y cultural de Guadalajara”, comentó Brambila.
Previamente, el grupo de estudiantes y profesores estuvo en el ITESO para recorrer el campus. Los jóvenes, provenientes no sólo de Canadá, sino también de Japón y Hong Kong, comentaron que están muy interesados en desarrollar una perspectiva de trabajo enfocada al branding positivo que implica desmitificar el imaginario colectivo acerca de un país o región. Para ellos, la clave es potenciar las redes sociales para ser contadores de otras historias, aquellas que no son parte del discurso publicitario dominante. Argumentan que el turismo no sólo son los hoteles de cinco estrellas, sino que también puede ser la consolidación de estrategias de networking que crean lazos de amistad entre gente de diferentes países, así como proponerse que las experiencias de visita sean más personales y menos empresariales.
La recta final del viaje tuvo lugar en el occidente del estado de Jalisco: Mascota, San Sebastián del Oeste y Ahuacatepec, donde se hospedaron en la casa Labastida para apreciar cómo era la vida de los hacendados. También visitaron la taberna Tres Gallos, en la que tuvieron la oportunidad no solamente de hacer una cata de raicilla con mixología y maridaje, sino también de conocer el proceso de elaboración del destilado con todo y el trabajo de jimar unas piñas de agave. Los estudiantes comprendieron una de las actividades económicas clave de la región que es objeto del PAP y que ha visto un reciente crecimiento importante gracias a la aparición de más marcas de la bebida. Los nuevos productores han sido beneficiados en parte por el trabajo de capacitación y emprendimiento que se fomenta desde el Centro de Educación Tecnológica Agropecuaria (CBTA 31) de Mascota, donde se hizo una parada para visitar sus talleres e invernaderos. “Mascota y San Sebastián del Oeste fueron claves para que los estudiantes comprendieran el enfoque de planeación turística, desde la mercadotecnia hasta la gestión de fondos federales para Pueblos Mágicos, que permite el desarrollo económico y la preservación”, puntualizó Alfredo Brambila.
La colaboración con Royal Roads ha dejado muchos frutos al estrechar lazos regionales e internacionales simultáneamente, en beneficio de un proyecto académico. “El viaje rebasó expectativas, nos ha permitido ver las formas de gestionar alianzas con las comunidades y explorar posibilidades para fomentar este tipo de turismo que tiene tanto potencial para generar beneficio a las zonas. Es, además, una experiencia formativa y de desarrollo personal para los visitantes”, concluyó el académico.