Jorge Rocha, coordinador de la Maestría en Política y Gestión Pública del ITESO, considera que el sector informado y que participa en los debates del país no perderá atención en la discusión del Senado sobre la reforma energética, a pesar de los partidos de futbol.
Las personas que se informan y debaten sobre temas políticos lo harán con o sin partidos de México durante el Mundial de Futbol Brasil 2014, consideró Jorge Rocha, coordinador de la Maestría en Política y Gestión Pública del ITESO.
“[El empalme de fechas] puede opacar algunas cosas, pero cortina de humo no es. La gente que está desinformada ya está desinformada por esta u otra razón; desinformada y desinteresada. La gente interesada y activa no deja de hacer cosas por el Mundial. En realidad, lo que a veces sí afecta es que sean en periodos vacacionales, más que el futbol. Cuando algo se aprueba con un pie en vacaciones, eso sí impacta a la movilización”, afirmó.
“Si se genera el tema de debate, lo va a ser aún y con futbol. Obviamente, no va a ser lo más importante en las planas, pero sobre todo para la gente que sí discute y está en el ‘círculo rojo’ no hay ninguna afectación”.
Rocha agregó que las personas que están involucradas en causas sociales y al pendiente del escenario político también pueden ser aficionadas al futbol, pero eso no ni significa que una actividad se anteponga a la otra.
“Hay gente que se engancha, pero es gente que quizá ya está desinformada y que siempre está en el futbol, que primero está viendo a las Chivas o al Atlas, en el caso local, y entonces ahora el fetiche es la selección, pero es gente que ya está fuera de la discusión de antemano”.
Este jueves, las comisiones unidas de Energía y Estudios Legislativos del Senado de la República aprobaron el calendario de discusión para las iniciativas secundarias de la reforma energética, que serán del 6 al 17 de junio, lo que coincide con los primeros partidos del Mundial de Futbol.
El académico agregó que, dado el escenario de confrontación entre los partidos políticos, es difícil que lleguen a un consenso sobre la Reforma Energética.
“Hay reformas en las que si todos los actores políticos están de acuerdo, pueden sacar la ley a espaldas de la gente. En el caso de la Reforma Energética no, porque sí hay lucha entre los partidos, hay un escenario diferente. No es que exista lo que le llaman el típico ‘sabadazo’, en que aprobamos entre todos y la gente ni enterada. La pueden debatir, pero hay tiempo”, explicó.
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Falta educación cívica
El coordinador de la Maestría en Política y Gestión Pública del ITESO destacó que hay dos razones, principalmente, por las que los mexicanos no están interesados en política.
La primera, señaló, es que sí hay un grupo importante de personas a las que explícitamente la política en México no les interesa: “Hay muchos que dicen ‘no quiero participar porque no se cambia nada, porque no se transforma, porque a mí el sistema no me ha dejado nada’. En un país donde la mitad de la población está en pobreza, ¿por qué se va a interesar en la política? Si la política no le deja nada. Hay una decisión racional, bastante explicable, ‘si yo veo corrupción, veo que los políticos hacen lo que quieren, si veo pocos beneficios, si veo más pobreza, ¿por qué me voy a meter a la política? Además ya he visto a otros que hacen y así no cambian las cosas. ¿Para qué me meto si no cambia nada?’ Obviamente no es justificable, pero sí es explicable».
La otra razón es la falta de formación cívica en el país, lo que deriva en ciudadanos poco interesados por la política. Para Rocha, la gente activa, que discute, se informa y debate, es el diez por ciento de la población. Por ello, es necesario trabajar en la concientización política y la formación ciudadana de los mexicanos.
«Hay que trabajar en la formación social y política de la gente, ahí hay un déficit muy importante que tenemos en el país. En segundo lugar, mientras continúen las dinámicas de corrupción e impunidad, muy poco van a avanzar las cosas. ¿Qué quiere decir eso? Si la gente ve que su acción de denuncia o de proposición no termina en nada, pues se desalienta la participación. Y un tema fundamental para que las cosas funcionen es evitar la corrupción y la impunidad».
También destacó casos locales e internacionales en los que los escenarios deportivos han servido para que la ciudadanía exprese su descontento ante acciones de su Gobierno. Es el caso de Brasil, sede del Mundial de Futbol, donde están aprovechando el reflector internacional para hacer visible la situación social del país.
En el caso local, sucedió en el 2011 con los Juegos Panamericanos, donde hubo personas que dejaron de acudir a la justa deportiva como muestra de su descontento por la forma en que el Gobierno del Estado manejó los recursos públicos y la construcción de instalaciones, entre otras inconformidades. Texto Laura Rodríguez Foto FIFA.com
