La Primavera, el pulmón de la ciudad (re) clama su conversación. Conoce distintos proyectos universitarios que escuchan la voz del bosque y nuestra posibilidad de permanecer en este territorio.
POR MARINÉS DE LA PEÑA DOMENE, ACADÉMICA DEL CENTRO INTERDISCIPLINARIO PARA LA FORMACIÓN Y VINCULACIÓN SOCIAL DEL ITESO
La Zona Metropolitana de Guadalajara crece a pasos agigantados, el tráfico es cada día más denso y la contaminación se eleva; la ruidosa y estresante mancha urbana va invadiendo cada vez más espacios del Valle de Atemajac. Al lado de esta vorágine urbana se encuentra el Bosque La Primavera, el relicto de bosque y zona de refugio de flora y fauna silvestre, el llamado pulmón de la zona metropolitana. Callado y majestuoso aguarda a que nos detengamos unos minutos y lo volteemos a ver, quizá entonces lo podamos comprender y valorar.
Para nosotros el Bosque La Primavera significa la posibilidad de permanecer en este territorio. Sin el bosque ¿dónde se recargarían de agua nuestros acuíferos? Sin el bosque ¿hasta dónde se elevaría la temperatura de la ciudad? ¿A dónde iría el aire contaminado que exhala la ciudad? Sin el bosque ¿dónde podríamos apreciar las copas de tantos pinos y encinos juntos? Sin el bosque ¿en qué se convertiría la perla tapatía? Somos mucha gente para un bosque porque somos muchos los que dependemos del bosque para subsistir en esta ciudad. Dependemos de la calidad del aire que filtra, del agua que ayuda a infiltrar en el subsuelo, de los animales que alberga y que a su vez polinizan, dispersan y controlan el crecimiento de plagas. Mucha gente para un bosque porque también necesitaremos ser muchos los que lo valoremos y lo cuidemos. Todos dependemos del Bosque la Primavera y el bosque necesita de todos nosotros.
Más de 80% del bosque es propiedad privada o ejidal y eso le confiere, a esta área natural protegida, características particulares que se deben tomar en cuenta en las gestiones y manejo del mismo. Lo cierto es que, al igual que en la mayoría de las zonas protegidas, las autoridades solas no pueden hacer el trabajo de conservación, sino que precisamos de la participación de los ciudadanos. Aunque cada día somos más los que estamos preocupados por el bosque y que creemos necesaria su protección y conservación, muchas veces no encontramos cómo encaminar nuestros deseos de hacer algo por él. ¿Cómo podemos ayudar en acciones concretas que abonen a la conservación?
Desde el ITESO, hay algunas iniciativas que buscan este fin.
- El proyecto de Bosque Escuela convoca a estudiantes, a quienes trabajan en la universidad y al público en general a realizar actividades de restauración ecológica como plantaciones de especies nativas, obras para retención de suelo y manejo de especies invasoras. Las actividades de Bosque Escuela están organizadas y coordinadas desde el Proyecto de Aplicación Profesional (PAP) “Desarrollo Tecnológico para la Sustentabilidad Ambiental”, que lidera Hugo de Alba.
- También el ITESO ha convocado a otras universidades que cuentan con predios dentro del bosque a hacer un frente común para su restauración y conservación. Así se ha creado la iniciativa de Bosque Interuniversitario, que busca preservar parte del Bosque de la Primavera trabajando en conjunto desde las universidades.
- Al mismo tiempo, el PAP de Anillo Primavera que se ha convertido también una asociación civil y que coordinan Sandra Valdés y Pedro Alcocer, realiza proyectos en zonas circundantes del bosque La Primavera con fines de conservación y educación ambiental
- El PAP de Vida digital que coordina Jorge Pardiñas, donde monitorean diversas variables ambientales dentro del bosque y en zonas aledañas.
Al buscar iniciativas concretas de conservación y que convoquen a la participación ciudadana encontramos varias, pero una en particular llama la atención pues cumple de manera cabal con estos dos objetivos y es Guardianes del Bosque. Desde CCAIE (Centro de Cultura Ambiental e Investigación Educativa), el proyecto de Guardianes del Bosque busca sumar a ciudadanos para promover el conocimiento del bosque y para realizar acciones para la conservación del mismo. Una de estas iniciativas más emblemáticas es Corazón del Bosque, que inició como una Asociación Civil en 2018, formada por 13 ciudadanos representantes de grupos interesados en la conservación del Bosque La Primavera. Su propósito es lograr reunir fondos para crear reservas ciudadanas en predios con alto valor ecológico en el corazón del bosque para protegerlo de las amenazas que golpean incesantemente al bosque.
Guardianes del Bosque es un ejemplo sin igual de lo que los ciudadanos unidos por un fin común pueden hacer para proteger y conservar el bosque en el largo plazo. Este proyecto es coordinado por la maestra María Fors, quien destaca dos elementos que debemos recordar para la conservación. La primera es la urgencia de que las personas conozcan el bosque y nuestro vínculo esencial con él, la segunda es que logremos la integración del trabajo en común de la ciudadanía, pues sin ella esta labor parece imposible.
Hay muchas maneras de abonar a la protección del bosque, desde conociéndolo y concientizando a otros de su importancia, apoyando en la limpieza de sus ríos, ayudando a la recaudación de fondos, ya sea tocando puertas de gente interesada, promoviendo las actividades de esta y otras iniciativas en pro del bosque o hasta juntando latas que se entregan en diferentes centros de acopio.
Nuestra calidad de vida depende de que cada habitante de esta ciudad se vuelva un guardián de este bosque. Somos tantos para un bosque si abonamos a su conservación día con día, si sumamos a más personas, si lo valoramos por su riqueza natural y por la riqueza de beneficios que obtenemos de él. La realidad es que tenemos que ser muchos los que alcemos la voz para defenderlo y pongamos las manos para trabajar en su cuidado. ¡Seamos más!
Para más información acerca de los PAPs del bosque consulta: https://pap.iteso.mx/
Para más información acerca de los proyectos de Guardianes del Bosque consulta: https://ccaieambiental.com/guardianes-del-bosque/