Ana María Vázquez, directora del Departamento de Estudios Sociopolíticos y Jurídicos del ITESO, rindió protesta como presidenta del Consejo Ciudadano de Seguridad.

La seguridad es un tema que le ha preocupado a Ana María Vázquez por mucho tiempo y ahora que rindió protesta como presidenta del Consejo Ciudadano de Seguridad de Jalisco reflexiona sobre la importancia de la participación ciudadana en estos espacios.

Cuenta que llegó al Consejo porque la propusieron y reconoce que, al igual que ella, seguramente hay muchas personas que no están pensando activamente en cómo participar, “algo que tenemos que hacer es compartir la cultura y la posibilidad de estar en espacios de participación de este tipo para que seamos muchos más”.

“La violencia contra las mujeres y de género, y la crisis de personas desaparecidas que duelen profundamente en Jalisco, deben tomarse medidas contundentes para responder puntualmente a las demandas de colectivos y personas afectadas todos los días por la gravedad de estas violencias que enfrentan procesos institucionales, lentos y oscuros”. 

La directora del Departamento de Estudios Sociopolíticos y Jurídicos del ITESO, al igual que los otros ciudadanos que integran el consejo dedicará parte de su tiempo a ocuparse de uno de los problemas más apremiantes del estado y del país.

Ana María Vázquez señala que es importante tener calma para analizar lo que se hace y cómo se hace, y en el consejo “un tema fundamental va a ser poder reflexionar hacia dónde ir primero, que línea atender, primero en términos de ruta crítica, pero también de que pueda ayudar a largo plazo y no solamente responder a lo más inmediato”.

A su toma de protesta ante Enrique Alfaro, gobernador de Jalisco, asistieron Pablo Salcedo el ex presidente del consejo; Luis Arriaga, SJ, Rector del ITESO; así como los consejeros representantes de las universidades José Antonio Esquivias Romero, rector de la UP, y Francisco Ramírez Yañez, rector de la Univa.

En la ceremonia, la profesora señaló que “la juventud actual nació ya en un contexto de violencia y se desarrolla en uno agravado donde prima la vulnerabilidad, las inconformidades, la polarización y enfrentamientos que amenazan todos los días la convivencia solidaridad y armonía comunitaria”. 

Destacó que es importante reconocer las causas de las violencias e instó a atender de manera articulada las desigualdades en las que está gran parte de la población. “No podemos aceptar que continúe violentándose la vida y la dignidad de las personas”. 

Para Ana María Vázquez es fundamental entender y atender la seguridad desde una visión integral y actuar de manera colaborativa “y avanzar hacia una seguridad que incluya prevención, atención a víctimas, justicia y bienestar en sentido amplio”. 

Entre las ideas que expuso sobre la labor del órgano ciudadano que ahora dirige está el realizar un trabajo coordinado de las instituciones que tiene a su cargo la seguridad en la entidad “no bastan las declaraciones de voluntad y debe resultar en acciones concretas por un bien mayor que nos interesa a todas y todos: la seguridad de las personas que habitamos en Jalisco”. 

Así como el impulso de políticas públicas en este ámbito que tengan un enfoque de seguridad humano y cultura de paz. 

E hizo énfasis en lo que denominó una deuda de largo plazo. “La violencia contra las mujeres y de género, y la crisis de personas desaparecidas que duelen profundamente en Jalisco, deben tomarse medidas contundentes para responder puntualmente a las demandas de colectivos y personas afectadas todos los días por la gravedad de estas violencias que enfrentan procesos institucionales, lentos y oscuros”. 

El rasgo distintivo del quehacer del consejo, dijo, es el trabajo conjunto, interdisciplinar y horizontal. “Vinculado a lo anterior está la riqueza de una mirada crítica, propositiva y comprometida que con solidez académica desarrolla marcos novedosos e integrales para observar y diagnosticar la situación de la seguridad en el estado de Jalisco”. 

Ana María Vázquez instó a colaborar rechazando la violencia y la polarización. 

“Quienes integramos el consejo lo hacemos como una expresión de nuestra preocupación y disposición para contribuir a mejorar la vida de todas las personas en el estado con responsabilidad social y espíritu de solidaridad, con esperanza, sensatez y prudencia, pero también con firmeza, pondré en ello mi tiempo y energía”.