En el marco Emplearte ITESO 2019 se realizó un panel en el que se revisó el tema del empleo en el contexto de la Administración de la 4T
POR ÉDGAR VELASCO

Diez meses han pasado desde que  Andrés  Manuel  López  asumió la presidencia de la república y todavía sigue generando expectativas. A casi un año de su llegada al mando del Poder Ejecutivo, aún  se  sigue  hablando  del  cambio  que habría de llegar de la mano del político tabasqueño. Por eso, no es de extrañarse que en el marco de Emplearte 2019, las jornadas de empleo y emprendimiento que organiza el ITESO, se abriera un panel titulado “El  empleo  en  la  cuarta  transformación,  ¿hacia  dónde  vamos  con  AMLO?”  para  que  en  palabras  de  Jorge Rocha, director de Integración Comunitaria, “reflexionemos sobre las dinámicas de estos dos temas en un momento de cambio social”.

Carmen García, Sergio Negrete, Daniela Jiménez e Ignacio Román fueron los participantes de la charla que giró en torno a un “tema candente”, como fue descrito por José de la Cerda, director del Departamento de Economía, Administración y Mercadología (DEAM) del ITESO, encargado de moderar las intervenciones. La primera en tomar la palabra fue Carmen García, gerente de Vinculación Gubernamental y Académica de Manpower Group. Sabedora de que las agencias de outsourcing no gozan del mejor de los prestigios, comenzó señalando que era importante saber distinguir entre los corporativos que prestan este servicio, a los que describió como el colesterol. “Así como hay colesterol bueno y malo, así pasa también con las empresas de outsourcing. Hay malas, que se usan para malas prácticas, para la evasión fiscal, por ejemplo, y otras son buenas, que buscan garantizar prestaciones, empleos de calidad, el crecimiento de las personas”.

La representante de la multinacional también es la responsable de implementar en la empresa el programa Jóvenes Construyendo el Futuro, una de las apuestas principales de la administración de la llamada 4T y que busca dar empleo a jóvenes como aprendices. Carmen García señaló que “el ensayo ha valido la pena, el programa tiene una función importante a nivel social, porque prepara a los muchachos para enfrentar el mundo laboral y ayuda a combatir el empleo informal”. Detalló que en Manpower hay 120 jóvenes participando del programa que busca romper el círculo vicioso según el cual a los jóvenes no se les contrata porque no tienen experiencia laboral y no tienen experiencia laboral porque no se les contrata.

El segundo en exponer sus puntos de vista fue el profesor del DEAM Sergio Negrete. Dijo que el empleo es un elemento central en el Plan Nacional de Desarrollo concebido por el presidente, en el que el gobierno funge como único promotor y no considera al sector privado como motor de crecimiento. Señaló que la iniciativa privada es desdeñada en el proyecto presidencial y comentó que “el programa para ninis se presta para la opacidad y la irregularidad”.

Daniela Jiménez, directora del Centro de Reflexión y Acción Laboral (Cereal), señaló que el reto en la actualidad es el respeto de los derechos humanos en materia laboral y destacó el trabajo que se realiza desde el centro para acompañar a los trabajadores. También dejó clara la preocupación que tienen desde el Cereal con el programa Jóvenes Construyendo el Futuro, pues puede transformarse en un pretexto para no cumplir una obligación que tienen los empleadores aprovechándose de la figura del aprendiz.

El último en tomar la palabra fue el profesor Ignacio Román quien señaló que lo primero que había que plantear era la idea que se tiene del concepto de empleo, ya que éste se ido diversificando y cada vez hay nuevas formas de trabajo. También se refirió al deterioro del poder adquisitivo en el país y señaló que hay una caída en el crecimiento global.

Durante la charla abierta con las y los asistentes congregados en el auditorio D1 del campus, el tema que más acaparó la atención fue el de Jóvenes Construyendo el Futuro, calificado por el profesor Sergio Negrete como “plagado de corrupción”. Dijo que era necesario rediseñarlo ya que era evidente que era un “programa hecho al aventón, improvisado de la nada”, mientras que Daniela Jiménez consideró que “como política de empleo hay mucho que observarle”.