El libro Ki Ti ‘Utame Yu’uximayati – Museos Vivos, recupera experiencias culturales de las comunidades wixárika, na’ayeri y saami.

POR OFICINA DE COMUNICACIÓN INSTITUCIONAL

“No solo queremos dejar impreso cómo éramos antes; no es escribir el pasado, sino escribir sobre la cultura que tenemos ahora, cada pueblo originario”. Fue así como Lisbeth Bonilla, egresada de Administración de Empresas y Emprendimiento del ITESO y parte de la comunidad de Tateikié, en el norte de Jalisco, explicó el objetivo del libro Ki Ti ‘Utame Yu’uximayati – Museos Vivos: Experiencias wixárika, na’ayeri y saami.

Este texto, presentado el miércoles 11 de octubre en el Auditorio Q, documenta los esfuerzos en común de las comunidades wixárika, na’ayeri y saami para la conservación de su patrimonio cultural. Está escrito en español y wixárika, y cuenta con un acervo fotográfico de la trayectoria.

Actoras del proyecto en sus distintas composiciones (traducción, edición, imágenes y diseño editorial), reflexionaron sobre el esfuerzo que significó esta documentación etnográfica.

María José Pérez, egresada de Diseño Integral (colaboradora del Programa Indígena Intercultural) coordinó la charla, en la que participaron K+p+ri – Lisbeth Bonilla; ‘Uutiana –, Apolonia de la Cruz, profesora del Centro Educativo Intercultural Bilingüe Tatuutsi Maxakwaxí; Ana García, quien coordinaba la Asamblea de Estudiantes Indígenas y forma parte del colectivo Jóvenes Indígenas Urbanos en la Zona Metropolitana de Guadalajara; y Lea Kantonen, de la Coalición de Acción e Investigación Para La Justicia Social y Dignidad Humana (CRASH).

“Es un esfuerzo por conservar los objetos y las investigaciones, para fomentar en un pueblo el conocimiento de su cultura y sus historias. También pensamos en hacer un espacio específico para nuestras presentaciones musicales o eventos culturales que se llevan a cabo. Buscar una manera común de trabajar en la que todas las personas pueden presentar sus propias iniciativas, o de convivencia”, explicó Lisbeth Bonilla.

Este libro existe, en parte, por la cooperación entre Finlandia y México en temas culturales. Utilizaron como referencia el Museo Siida en Inari, en el norte de Finlandia, el cual ha fomentado la preservación de la cultura del pueblo indígena saam, por más de 50 años, y cuya historia se incluye en el texto. El libro, además, ha sido compilado por la artista Lea Kantonen, también profesora de la Universidad de Artes de Helsinki.

“Fue el intercambio entre todas estas comunidades que realmente produjo el contenido de este libro”, explicó la artista finlandesa. “Estoy orgullosa del privilegio de trabajar con los guardianes culturales, quienes se esfuerzan por preservar y revitalizar la cultura y la lengua wixárika, na’ayeri y saami”.

Como resultado de este trabajo, surge una red de museos, entre cuyos promovedores se encuentran la Red de Centros Educativos Interculturales Wixáritari y Na’ayerite (Red CEIWYNA), el ITESO y la organización civil finlandesa CRASH. El Ministerio de Asuntos Exteriores de Finlandia ha patrocinado la iniciativa desde 2012.

Comuneros de Tsikwaita, ‘Uweni Muyewe y Muxatej, en conjunto con miembros del colectivo CRASH, realizaron un performance para cerrar con la presentación.