De la mano del Instituto Politécnico Nacional y la Universidad Nacional Autónoma de México, y con la participación de estudiantes y académicos, el ITESO contribuye en el desarrollo del módulo EMIDSS-4, que será puesto en vuelo suborbital en agosto próximo
Se estima que, en 2021, fueron más de 6 mil las hectáreas del Bosque La Primavera que resultaron afectadas por incendios forestales. A pesar de las prontas movilizaciones de los cuerpos de bomberos para combatir los fuegos, el impacto medioambiental, social y económico fue considerable. Aunque una apuesta importante es el pronto avistamiento de incendios forestales para evitar mayores estragos, las tecnologías hasta el momento disponibles tienen muchas limitaciones de telecomunicación.
Un pequeño módulo suborbital podría contribuir a la solución de este problema. El ITESO participará en la misión FY23-FTS de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), con el EMIDSS-4 (Experimental Module for the Iterative Design for Satellite Subsystems, versión 4), módulo suborbital en el que se probarán diversos desarrollos tecnológicos.
El proyecto es liderado por el Centro de Desarrollo Aeroespacial del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y también cuenta con la participación del Instituto de Ciencias Aplicadas y Tecnología (ICAT) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Es la segunda ocasión en la que las tres universidades reciben la invitación para participar en el Programa de Globos Científicos de la agencia estadounidense.
Luis Rizo Domínguez, coordinador de la Especialidad en Sistemas Embebidos y quien encabeza los trabajos del ITESO, explicó que la universidad jesuita de Guadalajara estuvo a cargo del desarrollo de una On Board Computer (OBC), «la cual censa y registra variables como temperatura y presión atmosférica, para su posterior análisis», dijo.
«Este sistema embebido cuenta con un microprocesador S32K144 de grado automotriz, proporcionado por (la firma) NXP, lo que la hace más robusta que las versiones anteriores del EMIDSS», señaló el académico.
El EMIDSS-4 llegará al ITESO en julio para que se cargue la última versión del software y se lleven a cabo las pruebas térmicas y de vibración. El vuelo está previsto para el 5 de agosto, saliendo de Fort Sumner, Nuevo México, Estados Unidos.
Los experimentos y datos recolectados por el EMIDSS-4 aportarán al desarrollo del ITESAT, satélite de órbita baja del ITESO que tendrá como principal objetivo medir variables remotamente. Al momento, el proyecto está en fase de diseño.
Más allá de la oportunidad de que el módulo llegue a estar en órbita, el académico destacó que este proyecto aporta mucho a la formación de los estudiantes, quienes ganarán experiencia colaborando en un proyecto interinstitucional y multidisciplinario, además de que ponen en práctica sus conocimientos con el desarrollo de tecnologías.
En el equipo ITESO colaboran estudiantes de Ingeniería Electrónica, Ingeniería Mecánica y de la Especialidad en Sistemas Embebidos, así como académicos de los departamentos de Electrónica, Sistemas e Informática (DESI) y de Procesos Tecnológicos e Industriales (DPTI).
En 2022 se lanzó a vuelo suborbital el EMIDSS-3, para el cual académicos y estudiantes del ITESO colaboraron en el diseño de la computadora de vuelo del proyecto, la cual consistió en el desarrollo de una tarjeta en una plataforma reconfigurable que además aguantara condiciones extremas, como temperaturas de 70 grados bajo cero, el vacío y la radiación.
Aplicaciones de tecnología satelital
Los software desarrollados desde el ITESO tienen la intención de sumarse a un sistema de percepción remota que permita mejorar el monitoreo de incendios en el Bosque La Primavera.
En el predio del bosque que está bajo el cuidado del ITESO hay una red de sensores que miden dióxido de carbono, temperatura y humedad. Estos insumos pueden servir para avistar incendios, además de que aportan datos valiosos para la investigación en la zona. Sin embargo, el terreno complica las condiciones para que exista una comunicación constante con esos sensores. Una conexión satelital permitiría garantizar esta comunicación y expandir la zona de cobertura.
Rizo Domínguez señaló que la tecnología satelital tiene un gran aliado en el internet de las cosas y otras disciplinas, por lo que no descartó trabajar en proyectos independientes que se conjunten.
FOTO: Luis Ponciano