A través de un conversatorio virtual se reflexionó sobre diversas técnicas de trabajo participativo con mujeres adolescentes a fin de recuperar y compartir sus historias y vivencias de violencia
Por Patricia Margarita Salazar Muñoz, integrante del Grupo de Trabajo Adolescencias, Juventudes, Violencias y Derechos (AJUVID-FLAD-México)
Como parte de las actividades del Grupo de Trabajo Adolescencias, Juventudes, Violencias y Derechos (AJUVID) del Foro Latinoamericano de Antropología del Derecho sección México (FLAD-México), se llevó a cabo el pasado jueves 25 de abril el conversatorio “Investigación, juego y creatividad: reflexiones en torno al acompañamiento de procesos lúdicos y creativos con adolescencias en contextos de violencia” dónde se compartieron dos experiencias de investigación a través del juego y de procesos creativos como herramientas de investigación con adolescencias. El diálogo se sostuvo a partir de las presentaciones de las investigadoras Cindy Janet Guerrero Cansino, quien es doctorante del Posgrado en Antropología Social en la UNAM y estudiante de la especialidad en Sexología Educativa por el Instituto Mexicano de Sexología y Gabriela Sánchez López, Profesora-Investigadora del Departamento de Psicología Educación y Salud del ITESO, y quien junto con Alejandra Gómez y Laura Serrano es también coordinadora del AJUVID. Cindy y Gabriela presentaron dos propuestas en las que trabajaron con grupos de adolescentes para reflexionar sobre las violencias que viven día a día, apoyadas por la antropóloga Raquel Ramos como moderadora.
Cindy Guerrero compartió su experiencia generando espacios lúdicos para el trabajo con adolescentes en una secundaria a partir de su proyecto, “Subjetividades y violencias encarnadas en mujeres jóvenes que habitan en un internado femenil”, mismo que se llevó a cabo en Michoacán. Concretamente, Cindy elaboró un juego de mesa denominado “Memorias del internado” que consistía en un tablero inspirado en el juego serpientes y escaleras y fue adaptado como una forma de dialogar con las adolescentes. Las preguntas de las tarjetas del juego tienen que ver con los sentires de las adolescentes y los que les gustaría cambiar en su entorno; al mismo tiempo el juego les permite compartir historias sobre la escuela a la que acuden y crear juntas la memoria de este espacio. A partir del juego se generó mayor convivencia entre las alumnas, además de ser un espacio seguro para la expresión de las dudas que tenían sobre sus miedos, el cuerpo, la sexualidad.
También compartió otra estrategia lúdica que implementó en el trabajo con las adolescentes del internado en Michoacán, misma que surgió como resultado de las respuestas e inquietudes de las participantes en “Memorias del internado”. Esta la realizó en forma de un taller denominado “Diálogo y escritura entre mujeres jóvenes”, que fue un espacio seguro en el que las alumnas pudieran hablar sobre las violencias vividas en los distintos espacios que comparten y así lograr identificarse como iguales aún con las diferencias que les hace únicas.
En el segundo tiempo del conversatorio, Gabriela Sánchez presentó las metodologías de investigación colaborativa de un proyecto en el que participan 15 niñas y adolescentes de centros de asistencia social privados que han sido vulneradas por la violencia social y violencia de alto impacto. Estos lugares son conocidos por las participantes como «anexo», ya que funcionan tanto como refugios estatales de protección de acuerdo con la Ley General de Niñas, Niños y Adolescentes y como centros de rehabilitación para adicciones.
Durante el proceso, las niñas y adolescentes del proyecto se autodenominaron Nosotras Sobrevivientes. La colectiva, con el apoyo del equipo de investigación, participó en sesiones de asamblea donde se definió colaborativamente qué comunicar, cómo y a quién. Las niñas y adolescentes llegaron a la conclusión de que necesitaban expresar su necesidad de ser escuchadas, de recibir cuidados y de sentirse acompañadas; así como su cercanía con la muerte, el dolor y la violencia. Decidieron transmitir estos mensajes para impulsar cambios significativos como la erradicación de los feminicidios infantiles y la prevención del suicidio entre niños, niñas y adolescentes. Optaron por utilizar vídeos cortos, fotografías, maquillaje y música como medios de expresión. Las adolescentes justificaron su elección artística argumentando que es esencial que la gente «sepa que estamos aquí y lo que nos está pasando, porque parece que no lo saben o no les importa». Según ellas, el arte fue elegido como una herramienta para generar empatía y, en sus palabras, “para que la personas sientan nuestro dolor”. Finalmente se generó una obra colaborativa con todos estos insumos cuya exposición será inaugurada en la Galería de Arte de ITESO el 24 de septiembre de este año.
Gracias a la colaboración entre generaciones, se ha logrado concretar las ideas de las niñas y adolescentes en obras tangibles. Un claro ejemplo es la colaboración musical de la colectiva Nosotras Sobrevivientes con Sofía Martín del Campo, quien lidera una iniciativa en redes sociales llamada “Cuéntamelo y te lo hago canción”. Mediante una metodología colaborativa, que permitió a las participantes compartir sus experiencias, se generó la letra de la canción. Las chicas participaron en los coros y, además, la rapera Ria Dezner contribuyó con un rap y ayudó en los arreglos musicales. La canción se convirtió en un testimonio que aborda las violencias experimentadas por las jóvenes, reflejando la resiliencia expresada en la letra de Ria Dezner: “sobrevivimos este caos con honor”. Además, señaló que al contextualizar el espacio en donde viven se puede comprender la importancia de hacer una canción; en este sentido es necesario considerar algunas reglas del centro, entre estas, que se les impide escuchar música, conversar entre sí y tener vínculos de amistad, por lo que la creación de este material es también una forma de resistencia.
Gabriela destacó la importancia del arte en el proceso investigativo, aunque no fue el foco inicial. El proceso creativo surgió de un diálogo inicial con el grupo de niñas y adolescentes sobre sus deseos y expectativas: que las personas sepan que existen y que entiendan lo que les sucede, exponiendo su dolor. Lo anterior es un ejemplo de que el proyecto presentado se hace desde la horizontalidad y del reconocimiento de las niñas y adolescentes como sujetas de derecho.
Las investigadoras también compartieron sus experiencias como “sujetos sintientes” durante el proceso, abordando la risa, el llanto y el dolor como elementos que lejos de comprometer la objetividad de su trabajo, son indispensables para, en sus palabras “acuerpar estas problemáticas y procesos”. De manera similar, Cindy Guerrero enfatizó los desafíos de fomentar un ambiente donde el diálogo y la risa sean posibles, destacando la importancia de estas emociones en su trabajo.
Durante la ronda de preguntas las asistentes compartieron sus sentires sobre las estrategias lúdicas, sus dudas sobre cómo superar el adultocentrismo y verdaderamente acuerpar, así como su agradecimiento por compartir sus experiencias de trabajo con las adolescentes.
El conversatorio fue una oportunidad de abrir el diálogo sobre las estrategias lúdicas y creativas para construir conocimientos al tiempo de cuidar tanto a las adolescencias como a las investigadoras, las metodologías compartidas fueron ejemplo de cómo se puede generar conocimiento desde el respeto de las otras, reconociéndoles sujetas de derecho, personas con opinión propia y a partir de ahí recuperar sus experiencias a fin de abonar a las discusiones teóricas, sin que sea un ejercicio de extractivismo académico, sino más una colaboración.
El conversatorio fue el segundo de una serie de tres encuentros agendados para primavera 2024, por parte del grupo AJUVUD, que busca promover abordajes teóricos y metodológicos en torno a las investigaciones actuales sobre adolescencias-juventudes desde un enfoque transdisciplinario con enfoque de derechos y a través de la articulación de diversos actores. Para otras experiencias semejantes, te invitamos a seguir su agenda en redes sociales del Foro Latinoamericano de Antropología del Derecho sección México: https://www.facebook.com/FLAD.internacional/
FOTO: Say González