Estudiantes y profesores del ITESO forman parte del equipo interdisciplinario que desarrolla un material biocompatible capaz de integrarse con el hueso humano para aplicaciones en medicina regenerativa y cirugías maxilofaciales menores 

Un equipo conformado por estudiantes, egresados y académicos de la Ingeniería en Biotecnología del ITESO, en colaboración con investigadores del Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (CIATEJ) y la empresa TR Médica, trabaja en el desarrollo de un biomaterial sintético biocompatible para utilizarse en aplicaciones clínicas que implican reparaciones óseas menores. 

El material imita las características de porosidad y consistencia del hueso humano, a la vez que promueve la regeneración celular y facilita su integración con el tejido que lo rodea, lo cual lo cual lo convierte en una opción viable para casos de fisuras, traumatismos óseos menores o lesiones maxilofaciales. 

Al ser biocompatible, el material no se enfrenta a un potencial rechazo por parte del cuerpo humano. El compuesto tiene ciertos elementos químicos estructurales similares a los del hueso. Cuando la herida surge, es como parchar una llanta, pero no llega hasta ahí, sino que además esa matriz se alimenta con células nuevas”, explica David José Mendoza Aguayo, académico del Departamento de Procesos Tecnológicos e Industriales (DPTI) del ITESO. 

Existe la ambición de que este compuesto se pueda utilizar para reparar algunas cavidades postoperatorias derivadas de diferentes cánceres de hueso. Sin embargo, será necesario hacer las pruebas pertinentes para confirmar la viabilidad de este biomaterial como tratamiento para estas lesiones, asegura Mendoza Aguayo. 

(El material) tiene la capacidad de promover la adhesión de las células, como una matriz de crecimiento celular. Ese es el objetivo: que no solo sea una forma de rellenar lesiones e imperfecciones del hueso, sino que se coordine de manera conectada junto con el proceso de regeneración y que las células tengan la capacidad de poder crecer dentro de ese material”, explicó Ricardo Campuzano Ornelas, estudiante de noveno semestre de Biotecnología.  

Innovar desde la formación 

Este proyecto fue beneficiado por el Programa de Innovación en Jalisco (PROINNJAL) Desarrollo Tecnológico 2024 del Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología de Jalisco (Coecytjal), que promueve proyectos con potencial de transferencia tecnológica con la intención de fortalecer la competitividad de los sectores productivos de la región a través de proyectos de investigación aplicada, desarrollo tecnológico e innovación. 

Los trabajos comenzaron en marzo de 2025, desde el principio con la participación directa de estudiantes del ITESO, quienes no solo han desarrollado el biomaterial en laboratorio, sino que han sostenido diálogos técnicos con empresarios para alinear las necesidades clínicas con la investigación. 

Paloma García Jaime, alumna de séptimo semestre de Ingeniería en Biotecnología, comparte que el enfoque de la carrera apuesta por no quedarse en el desarrollo de un producto en el laboratorio: todas mis materias van más allá de solamente hacer ingenieros: apuestan a formar empresarios y científicos que se puedan ganar la vida con sus ideas y causar un impacto”, señala. 

El proyecto también integra contenidos de la asignatura “Ingeniería de tejidos”, que imparte Miriam Guadalupe Salgado García, egresada de la primera generación de la Ingeniería en Biotecnología y profesora del ITESO. “Los alumnos no se quedan en el laboratorio; sino que se meten a lo que sucede en la industria. Visitan centros de investigación, empresas, y se enfrentan a problemáticas reales. Eso fortalece sus capacidades técnicas, pero también sus habilidades blandas”, comparte. 

Además de contribuir con el diseño experimental, Iván Samayoa Cortés, egresado del ITESO y ahora estudiante de maestría en ciencias en innovación biotecnológica en CIATEJ, ha trabajado en la caracterización del material mediante microscopía electrónica de barrido, lo que permite conocer su porosidad y estructura tras distintos tratamientos.  

“El ITESO me dio una preparación muy sólida que me permitió integrarme con confianza al equipo de investigación en el posgrado”, señala.  

El equipo se completa con Emmanuel Díaz Martínez, coordinador del Laboratorio de reprogramación celular e ingeniería de tejidos del CIATEJ y profesor del ITESO, a la cabeza del proyecto, así como con Ana Paula Salcedo Uribe, también egresada del ITESO y estudiante del CIATEJ. 

Para Mendoza Aguayo, coordinador del Proyecto de Aplicación Profesional (PAP) “Apoyo a la investigación”, este desarrollo representa una de las mejores expresiones del modelo educativo del ITESO. “Estamos formando estudiantes capaces de generar conocimiento nuevo, pero también de aplicarlo con propósito y en colaboración con la industria”, menciona. 

El biomaterial se encuentra actualmente en etapa de formulación y validación y bajo secreto industrial, con miras a una futura producción y comercialización.  

 

FOTO: Zyan André