Sarah Alexandra Obregón es la nueva coordinadora de las maestrías en Ciudad y Espacio Público Sustentable y Proyectos y Edificación Sustentables del ITESO. Cuando trabajó como Directora de Planeación de la Secretaría de Desarrollo e Integración Social de Jalisco, el huracán Kenna causó graves daños en Puerto Vallarta.
El entonces gobernador, Francisco Ramírez Acuña, encargó a la secretaría tanto la atención a la población como la reconstrucción de las áreas afectadas y Obregón, doctora en Periferias, Sostenibilidad y Vitalidad Urbana por la Universidad Politécnica de Madrid, fue designada como coordinadora del proyecto.
Cuenta que esta experiencia le ayudó a entender lo importante que es para la planeación urbana el contar con una perspectiva amplia de las problemáticas, reunir a actores de distintas disciplinas y tener diálogo directo con los principales clientes: los habitantes.
Como nueva coordinadora de las maestrías del ITESO en Ciudad y Espacio Público Sustentable y Proyectos y Edificación Sustentables, está convencida de que para construir mejores ciudades se debe atacar desde distintos ámbitos.
“La sustentabilidad no se puede resolver desde un solo frente, si hay un grupo más diverso de disciplinas diferentes que entren a estos posgrados, será más fácil que se atiendan las problemáticas desde diferentes ámbitos de actuación”, considera.
Los posgrados del Departamento del Hábitat y Desarrollo Urbano (DHDU) arrancaron en agosto de 2013 y están desarrollados —como sus nombres lo indican— con la sustentabilidad como eje temático y planes de estudios que busca la interdisciplinariedad; están dirigidos a arquitectos, urbanistas, funcionarios, profesores y hasta miembros de ONG.
“Proponemos que salgan egresados capaces de trabajar en una desarrolladora de vivienda que mejore la calidad de vida de las personas; o funcionarios públicos capaces de construir nuevas políticas públicas para el tema de vivienda y ciudad; constructores conscientes de los impactos de los materiales que utilizan, los residuos que generan y del ahorro de energía”.
Otras miradas, mejores ciudades
El tema de arquitectura integradora ha estado presente en la trayectoria académica de Obregón, egresada de Arquitectura por el ITESO y con Maestría en Ciencias en Urbanismo y Desarrollo por la Universidad de Guadalajara.
En su tesis doctoral en la Universidad Politécnica de Madrid profundizó sobre género y urbanismo, evidenciando que se acostumbra a diseñar la ciudad con un perfil para hombres jóvenes de clase media; la estandarización limita las posibilidades de inclusión e imposibilita mejores lazos comunitarios.
“Hay que ofrecer otra mirada de la ciudad; cuando empezamos a ver que hay diferentes grupos de la sociedad que también conviven es cuando generamos ciudades más amables”.
Durante su estancia en España se desempeñó como investigadora en el Departamento de Urbanística y Ordenación del Territorio de la Universidad Politécnica de Madrid y en el Centro de Estudios Andaluces de la Junta de Andalucía. En México se ha desenvuelto en el sector público y privado con especial interés en la sustentabilidad y la vinculación con más actores fuera de la arquitectura.
Se ha especializado en la certificación de proyectos urbanos sustentables, iniciativa federal que ahora se le conoce como Desarrollos Certificados (antes Desarrollos Urbanos Integrales Sustentables), los cuales obtienen apoyo de la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi).
Obregón señala que ella tiene una visión optimista con la modificación en los paradigmas legales, sin perder de vista la postura crítica que el ITESO sostiene. La Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) absorbió programas de hábitat, vivienda, recuperación de espacios públicos y otros que originalmente eran de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), y ha abierto nuevos programas en los que egresados de las maestrías podrían participar.
“Empiezan a haber iniciativas [gubernamentales], ahora nos toca a nosotros la parte propositiva: lo que nosotros necesitamos ahora es conocerlas y comenzar a revertir ese modelo de desarrollo urbano que hemos seguido tanto, para atacar los problemas de movilidad, de falta de agua, de infraestructura y servicios”.
El problema de la vivienda no sea ataca solamente desde la Sedatu, opina; la gestión con todas las instancias gubernamentales relacionadas —las secretarías de Energía, de Medio Ambiente y Recursos Naturales, de Economía— le parece fundamental en el objetivo de los egresados de estas maestrías.
“Si no se ve el problema desde una manera integral, no se va a mejorar la calidad de vida de los habitantes”.
Vinculación para más conocimiento
Una meta que Obregón desea cumplir en sus cuatro años de coordinación es la vinculación con universidades jesuitas con posgrados similares; nombra a Colombia, Chile o Argentina, planea intercambio de profesores así como de alumnos, desea mayor intercambio de conocimiento.
También desea vincular los trabajos de obtención de grado de los alumnos con desarrolladoras de iniciativa privada, así como iniciativas de gobierno en los tres niveles
“Hay que entender que la ciudad está en constante movimiento, tenemos que diseñar y trabajar con la ciudad en ese mismo movimiento; cambian los autores, cambian los actores políticos, las dinámicas de la ciudad, pero los proyectos tienen éxito cuando la ciudad se apropió de ellos, cuando entendimos cuál era la demanda de la sociedad, qué necesitaba. Y esos proyectos siguen cambiando”.
Foto Roberto Ornelas