Por Christian Bustamante, estudiante de Nutrición y Ciencias de los Alimentos.

El otro día me preguntaba, ¿qué estaría haciendo si no estuviera lidiando con los aftershocks de esta pandemia? y me encontré con mis fotos los recuerdos del Vive ITESO, de cuando armamos un altar de muertos con una mesa, de los preparativos para celebrar mi cumpleaños y de mis días de voluntaria en el Festival. Debo decir de mis días favoritos.

Este año ha sido como vivir un terremoto colosal, en el que cada día sobrevivimos una réplica distinta al anterior, a veces suave, a veces fuerte; y con cada movimiento reconstruimos a nuestro alrededor. Si hay algo en lo que podemos coincidir es en que los cambios han sido, en su gran mayoría, permanentes, hemos desarrollado actitudes que ya no podremos olvidar con tanta facilidad y aunque en algunos casos esto significa algo bueno, hay otros en los que, pesa recordar cómo eran las cosas antes del constante movimiento.

El otro día me preguntaba, ¿qué estaría haciendo si no estuviera lidiando con los aftershocks de esta pandemia? y me encontré entre mis fotos los recuerdos del Vive ITESO, de mi sociedad de alumnos armando un altar con una mesa, de los preparativos para celebrar mi cumpleaños y de mis días de voluntaria en el Festival Cultural (que de más está decir que es una de mis experiencias favoritas de todo el año. Todavía tengo los gafetes de muchas de las actividades en las que estuve de staff).

Mientras veía esas fotos y videos me acordaba de todos los montajes que hice en estos 4 años; de todas las obras en las que di la bienvenida a los asistentes que ingresaban al auditorio; de los chocolates calientes con pan de muerto, después del recorrido por altares de Día de Muertos, que mágicamente aliviaban el estrés de haber estado montando dos días seguidos; de los Música al aire que terminaban en Noches de baile improvisando unos cuantos pasos, y de las exposiciones que me dejaron pensando por días.

«Este año no podré pasar el Festival con el resto de voluntarios, pero me sentaré con mi mamá para enseñarle este pedacito de vida que nunca había podido mostrarle. Si distancia es lo que tengo ahora, la usaré a mi favor.»

Fue un sentimiento agridulce, porque, por un lado, siento tristeza de no poder estar en el campus en mi último festival como alumna en el ITESO, de ya no tener otra oportunidad de ser staff, pero, por otro lado, fue un gran gusto saber que el festival no será otra de esas tantas cosas de las que me he tenido que perder este año, porque habrá una versión en línea.

Aunque ciertamente no será la misma experiencia que cuando estamos en el campus, lo disfrutaré de la mejor manera desde casa: pondré la tele gigante de la sala (para ver desde ahí las actividades que sean en Youtube), traeré palomitas, una cerveza y pondré cojines por todo el piso. Este año no podré pasarlo con el resto de voluntarios, pero me sentaré con mi mamá para enseñarle este pedacito de vida que nunca había podido mostrarle; si distancia es lo que tengo ahora, la usaré a mi favor.

Tal vez no me pase dos días armando el altar de muertos, pero puedo estresarme haciéndolo en digital para que el resto de mi carrera lo vea, como cada año, mientras se toman su chocolate caliente. No podré estar en el Música al aire, pero puedo aprovechar, por primera vez, las bocinas y poner música en mi casa a todo volumen… aunque después se quejen mis vecinos… al menos tendrán también la oportunidad de disfrutar la presentación de Caloncho y de San Juan Project.

Al final del día, el Festival es EL FESTIVAL. Sin importar donde esté o en qué modalidad sea, siempre será esa mezcla de colores, sonidos y emociones… una celebración a lo que somos como comunidad universitaria, desde gustos, hasta culturas y contextos. El Festival celebra la historia que compartimos mientras festeja la historia que construimos para llegar a donde estamos, con momentos buenos y malos. Si el mundo quiere que nos movamos, lo haremos, no porque vivamos en un constante aftershock, sino porque decidimos hacerlo, a nuestra manera… en grande.

Acondiciona tu sala, cocina o habitación como café-bar:

4 de noviembre de 2020, 20:00 horas, goza la originalidad de Caloncho https://cultura.iteso.mx/web/general/detalle?group_id=22118068

6 de noviembre 20:30 horas, el jazz cerrará el Festival al mando de San Juan Project https://cultura.iteso.mx/web/general/detalle?group_id=22118221

Súmate o sigue las actividades del Festival del 28 de octubre al 7 de noviembre. https://cultura.iteso.mx/web/general/detalle?group_id=21798514