Pablo Montaño Beckmann, egresado de la Licenciatura en Ciencias Políticas y Gestión Pública del ITESO, fue reconocido como un líder que inspira para buscar las mejores soluciones ante los desafíos que enfrenta el planeta

Quienes lo conocen saben que no se queda callado, menos aún cuando tiene mucho que decir. Y acerca del cambio climático siempre tiene algo que decir. Lo dice fuerte y claro desde las redes sociales, desde un documental, desde un pódcast, desde el activismo y hasta desde una campaña política. 

Pablo Montaño Beckmann, activista, comunicador y egresado de la Licenciatura en Ciencias Políticas y Gestión Pública por el ITESO, recibió en mayo pasado el Premio Wayfinder 2023 de parte de la Sociedad de National Geographic, lo que lo suma a la comunidad global de Exploradores de NatGeo y lo reconoce como parte de la generación de líderes que con su trabajo inspiran a crear soluciones para crear un futuro más sostenible. La distinción, señala el galardonado, le permitirá expandir la red de colaboración de Conexiones Climáticas, la organización de comunicación climática de la que es coordinador.  

“[Este premio] es un empuje impresionante para construir proyectos e iniciativas. Es motivo de mucha emoción y es un logro compartido: de mi familia, el equipo de Conexiones Climáticas, de Gael (García Bernal), que creyó en lo que yo estaba haciendo”, dice quien, gracias a su inseparable sombrero, pareciese que desde hace años se ha estado preparando para ser un Explorador NatGeo. 

Formación crítica

“Hay una parte de lo que hago que tiene raíces muy marcadas en el ITESO”, apunta. Llegó a la Universidad Jesuita en 2008 desde su natal Chihuahua, interesado en una carrera en ciencias políticas. La idea de venir a Guadalajara a estudiar se le quedó grabada luego de haber participado en una competencia de ciclismo durante sus años de bachillerato. Conoció el ITESO y supo que había llegado a su universidad. 

Más allá de la preparación académica que obtuvo, Montaño Beckmann reconoce que lo que vivió fuera de las aulas, en los voluntariados y en los colectivos estudiantiles —participó en Movilidad ITESO, Red de Universitarios Conscientes (RedUC) y El Huerto Universitario—, fue mucho más significativo para su formación y le permitió vivir una experiencia universitaria crítica.  

Tras egresar en 2012, participó en espacios como el Observatorio Ciudadano de Transporte Público y Movilidad del Estado de Jalisco y en el colectivo Ciudad para Todos. 

Necesitado de actualizarse, optó por estudiar una maestría en Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable en la University College London (UCL), lo que le dio las tablas para interpretar los conflictos ambientales desde su dimensión social y política.  

 

 

El tema del que necesitamos ocuparnos

Pablo Regresó a Guadalajara en 2017 justo para embarcarse en la odisea de una candidatura independiente para buscar la diputación federal por el distrito 8. “Me pareció que era un momento político en el que las candidaturas independientes podían llegar a ser un vehículo interesante para mover iniciativas, políticas, ideas y propuestas […] que podía ser un buen espacio para empujar una agenda ambiental climática urgente de la que no se estaba hablando”, apunta. 

A la par, llegó el aviso de una aventura aún mayor: la paternidad. “La misma semana que inició el proceso de junta de firmas para lograr la candidatura, mi esposa y yo nos enteramos de que estábamos embarazados”, recuerda. 

A pesar de llevar una campaña promisoria, cercano a figuras como Pedro Kumamoto, Montaño Beckmann perdió la elección. Recuerda ese momento como una lección importantísima, de la que rescató cómo la dicotomía de la conversación política, detonada por el entonces candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, no daba cabida a propuestas desde lo ambiental. 

Desde entonces, el activista ya encuentra más presente el tema en la agenda pública. Sin embargo, descarta tajantemente buscar otra candidatura, por el simple hecho de que los tiempos de la política son muy lentos y el contexto ambiental exige un cambio profundo, rápido e inmediato. 

“Nos podemos estar achicharrando, se puede quemar el Bosque La Primavera entero, podemos ver derretimiento de los polos, se puede inundar Tabasco, y no necesariamente vamos a reaccionar a la crisis climática. Va a seguir habiendo gente que insista en quemar combustibles fósiles y va a seguir habiendo una cultura de consumo desmedido que nos lleve al colapso. La situación es de terror; debería darnos miedo vivir lo que estamos viviendo”, señala. 

Su respuesta a este panorama fue crear, en 2021, junto con otros colegas, Conexiones Climáticas, organización dedicada a la comunicación y a la acción por el clima. “La pregunta que nos gusta resolver es qué podemos hacer frente a esta crisis. Y la manera en que le damos respuesta es a partir de la articulación de organizaciones, comunidades y proyectos en todo el país que están en escenarios que consideramos críticos frente a la lucha climática”, comparte.  

En ese mismo año, Montaño Beckmann se alió con el actor Gael García Bernal y la lingüista Yásnaya Aguilar para producir la serie documental El tema, que en seis capítulos retrata las realidades de la crisis climática en México. La experiencia fue, recuerda, un momento de validación a la apuesta de comunicar la emergencia medioambiental. 

El itesiano se mantiene firme en su intención de seguir en modo de emergencia para hacer “todo lo que podamos, lo más rápido que podamos, lo mejor que podamos”, acompañando luchas territoriales y colaborando con otros actores para construir soluciones al contexto mediombiental actual. 

FOTO: Luis Ponciano