Movilidad en el ITESO: una historia joven

Al mismo tiempo que en el AMG comenzó a hacerse notorio un movimiento que buscaba mejorar la movilidad para ciclistas, peatones y quienes usan transporte público, el ITESO también puso manos a la obra para escribir una historia que aún no tiene punto final

Por Yeriel Salcedo Torres, profesor del Departamento del Hábitat y Desarrollo Urbano y colaborador de la Coordinación de Programas de Incidencia Social (COINCIDE) del ITESO

Hace catorce años, a inicios del 2007 en el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG) comenzó un movimiento social que cuestionaba a los gobiernos municipales y al gobierno de Jalisco la manera en que usaban el dinero público en infraestructura para el automóvil, dejando a un lado otros medios de movilidad como la bicicleta, el transporte público y hasta lo más básico como caminar; se invertía más del 90% del gasto público en vialidades y pasos a desnivel para los coches.  

Este movimiento buscaba visibilizar los problemas relacionados con el coche como la contaminación del aire, la alta siniestralidad por atropellamientos, el aumento del congestionamiento de las vialidades, banquetas en mal estado, la falta de infraestructura para el uso de la bicicleta y un sistema de transporte público que no cubría las necesidades de las personas y que además daba un mal servicio. Los colectivos ciudadanos empezaron a realizar rodadas ciclistas, manifestaciones, congresos, charlas y eventos para difundir los beneficios de la movilidad sustentable para las personas y la ciudad, además de hacer incidencia política y social para lograr un cambio.

La comunidad estudiantil del ITESO no fue indiferente y se sumó a este movimiento social con la formación, a finales del 2007, del colectivo “Movilidad solidaria”, cuyo objetivo fue desincentivar el uso del coche para ir al campus, reconociendo que la universidad es un punto importante de atracción de viajes, en su mayoría en coches privados. Empezó a organizar rodadas ciclistas para llegar a las clases, incentivar los aventones, dar charlas en salones, realizar eventos como el Día de la Comunidad Solidaria enfocado en la movilidad, acciones de intervención en el campus, talleres de mecánica básica y cómo andar en bici, y a difundir los beneficios del uso de la bicicleta en la salud de las personas junto al Departamento de Educación Física y Salud Integral. 

También se involucraron en la incidencia política para que el gobierno invierta en proyectos de ciclovías con otros colectivos como GDL en bici y Ciudad para todos para cambiar la manera en cómo nos movemos por la ciudad. Se unió a la convocatoria de un grupo de estudiantes del ITESO para la organización de la construcción de la ciclovía ciudadana de camino al ITESO, un ejercicio ciudadano que pone a los gobiernos el ejemplo de cómo construir ciclovías.

Para finales del año del 2012 el colectivo cambió su nombre a “Movilidad ITESO”, pero siguió buscando “promover dentro de la comunidad itesiana una forma de movilidad integral y consciente, capaz de contribuir a la mejora de la problemática socioambiental provocada por ese uso indiscriminado del automóvil”, y que la comunidad universitaria ponga el ejemplo de cómo sumar para tener una movilidad más sustentable en la ciudad.  

Fue uno de colectivos que fundaron la Red Universitaria para la Movilidad, un espacio que reunía a colectivos de diversas universidades de la ciudad y creó los grupos de WhatsApp de aventones, que hasta el día de hoy siguen funcionando.  

Asimismo, realizó una campaña de firmas en la que reunió más de 5 mil para que el Municipio de Zapopan construyera la ciclovía de avenida Mariano Otero, y buscó reforzar el tema desde la participación ciudadana en los presupuestos participativos.  

Dentro del campus también impulsó que el ITESO como institución realizara acciones en pro de incentivar cambios en la movilidad, y ese trabajo del colectivo logro incidir en la instalación de más y mejores estacionamientos para bicis, tener un espacio preferencial para coches compartidos que llegan al campus, tener una zona de aventones, la instalación de una estación de reparación de bicicletas, y que el tema de la movilidad sustentable se hablara y se abordara desde las y los estudiantes, académicos y la institución y tomara relevancia.  

Así, con ese camino recorrido, en septiembre de este año se cumplen los 14 años de Movilidad ITESO, en los que muchas mujeres y hombres desde sus primeros años de universidad trabajaron – y trabajan – para tener una mejor movilidad en la ciudad y en el campus, lo que se traduce en una mejor calidad de vida.  

Hoy podemos ver algunos de los logros de su incidencia política, social e institucional en proyectos y acciones que parten de cambios que impulsó un movimiento social que busca mejoras en el transporte público, mayor infraestructura ciclista y mejores condiciones para las personas que caminan. Por ejemplo, se está construyendo un sistema de transporte colectivo más eficiente y con mejor calidad de servicio como Mi Macro Periférico, que además incluye la construcción de una ciclovía que conectará al ITESO con otras partes de la ciudad; se mejoró la ciclovía de camino al ITESO; se construyó el carril de prioridad ciclista por la avenida Sierra de Mazamitla, que llega hasta avenida Patria por parte del ITESO, en el municipio de Zapopan, y están en planeación los carriles de prioridad ciclista en la avenida Padre Xavier Scheifler de calle Independencia hasta donde termina al sur, en la zona habitacional detrás del campus. 

Estos primeros catorce años en los que se ha trabajado y logrado mucho, nos conducen, no obstante, a entender la necesidad de seguir cambiando la forma como nos movemos, ya que la contaminación del aire sigue siendo un problema y continúan en aumento los congestionamientos en las calles y los siniestros viales, pese a que en la ciudad – gracias al movimiento ciclista y de otros colectivos – se cuenta con más ciclovías, cambios en el transporte público, se abordan las problemáticas de las y los peatones, se tiene un sistema de bici pública y hay cambios en leyes que buscan mejorar aún más la movilidad. 

El cambio es irreversible y es preciso seguir buscándolo para lograr su permanencia y así dejar las bases de una mejor ciudad y de un mejor campus para las nuevas generaciones.  

FOTOS: TOMADAS DEL FACEBOOK DE MOVILIDAD ITESO