Estudiantes de Derecho, fueron la primera pareja en llegar a una semifinal en la Inter-American Human Rights Moot Court Competition, certamen en el que ponen en práctica sus habilidades para llevar un litigio en una corte internacional. El camino que abrieron en 2024 continuó dando frutos este año
Cuando Jessica Roldán y Cassandra Frías decidieron participar en la Inter-American Human Rights Moot Court Competition, lo hicieron con una convicción: llegar más lejos de lo que ningún equipo representante del ITESO había llegado antes. Y lo lograron: en 2024 llegaron hasta la semifinal del certamen, quedando eliminadas por la dupla que a la postre ganaría la competencia. “Perdimos contra los mejores”, dicen ambas entre risas y con orgullo: cumplieron su objetivo y, además, abrieron un camino que este año tuvo una continuación, cuando Ana Izquierdo y Jorge Guerrero también lograron llegar a la semifinal.
La Inter-American Human Rights Moot Court es una competencia que se realiza en Washington D. C., Estados Unidos, en el que estudiantes de Derecho provenientes de diferentes partes del mundo llevan a cabo litigios de casos ficticios a partir de casos verdaderos que se han realizado en las cortes internacionales, como la Corte Interamericana de Derechos Humanos, el Tribunal General de la Unión Europea o la Corte Africana de Derechos Humanos. El ITESO ha tenido representantes en el certamen durante diez años y Jessica y Cassandra fueron las primeras en llegar hasta la semifinal en el certamen de 2024, en el que se defendió a Luciano Benítez quien sostuvo un litigio contra el Estado de Baraná por violaciones a sus derechos humanos en el entorno digital.
Jessica Roldán es egresada de Gestión Pública y Políticas Globales y ahora estudia Derecho, carrera que también está cursando Cassandra Frías. Explican que para llegar a la competencia primero se realizó una selección interna en el ITESO, coordinada por el académico Édgar Ayón. “Veníamos los sábados a un curso en el que llevamos una preparación en materias de derechos humanos y para conocer el marco legal del Sistema Interamericano de Derechos Humanos. La selección final se realizó con una corte simulada en la que se llevó un caso inspirado en el concurso anterior [de la Inter-American Human Rights Moot Court]”, explica Jessica. En su caso, toda esta preparación ocurrió en el semestre de Otoño 2023, y la competencia en Washington se realizó en mayo de 2024.
Ya en Washington, la competencia se realiza en inglés, español y portugués. Allá hay dos opciones: las y los litigantes defienden a la persona ficticia, en este caso Luciano Benítez, o a favor del Estado señalado de cometer violaciones a los derechos humanos, en este caso Baraná. En el caso que de la dupla itesiana, les tocó defender a Luciano Benítez y demostrar que sí era periodista, pues el Estado alegaba que no lo era y por lo tanto no había violado su derecho a la libertad de prensa y a la libre expresión.
Aunque el caso a litigar es ficticio, toda la defensa tiene como fundamento litigios que ya han ocurrido en las cortes internacionales. “Hay que profundizar en el estudio de las jurisprudencias existentes, interpretar las normas aplicables. En este caso, tuvimos que analizar todas las jurisprudencias relacionadas con derechos digitales”, dice Cassandra.
Ambas estudiantes coinciden en señalar que participar en la competencia fue una experiencia enriquecedora. “Te permite conocer la manera de trabajar de las otras duplas, sus formas de prepararse, aprender otros recursos. También es valioso porque te sales del aula y enfrentas un litigio en un marco internacional”, dice Jessica Roldán. Por su parte, Cassandra Frías dice que, en su caso, “al principio no creía que me habían elegido para participar. Yo empecé muy tímida pero el contacto con mi dupla, con el profesor, con otras personas me fue ratificando que sí podía”.
Ambas coinciden también en señalar que es importante que el ITESO apoye y difunda todavía más este tipo de experiencias formativas para seguir obteniendo buenos resultados. El camino está abierto y este año Ana Izquierda y Jorge Guerrero ya siguieron sus pasos.
FOTO: Luis Ponciano
