Hasta la actualidad se han descubierto 3 mil 791 exoplanetas y de llegarse a detectar vida en alguno, daría nuevas pistas sobre la evolución, afirmó Anahí Caldú Primo, del Instituto de Radioastronomía y Astrofísica de la UNAM , durante la Semana Mundial del Espacio, realizada en el ITESO.

¿Alguien sabe qué es un planeta?, preguntó Anahí Caldú Primo, del Instituto de Radioastronomía y Astrofísica de la UNAM, al inicio de su conferencia “Exoplanetas”. De la audiencia una persona se atrevió a responder, “es un cuerpo normalmente esférico, más elíptico que esférico, el cual está hecho de roca o gas y normalmente circula una estrella” dijo Ludwig Irepan Chavez Medina de 12 años de edad quien asistió la Semana Mundial del Espacio en el ITESO el martes 9 de octubre.

Desde esta definición la doctora en Astronomía inició un viaje por distintos conceptos y fenómenos astronómicos necesarios para aterrizar en las últimas investigaciones que realiza la NASA en la búsqueda de planetas y formas de vida fuera de nuestro sistema solar.

“En nuestra Vía Láctea calculamos que hay más o menos 100 mil millones de estrellas y si todas se forman de la misma forma pues la conclusión es que tiene que haber más planetas” explicó Anahí Caldú.

La astrónoma detalló que existen dos métodos para detectar exoplanetas: por velocidad radial y por tránsito. El primero consiste en detectar, a través de cambios de luz, aquellas estrellas que tienen una órbita –como el Sol– porque seguramente en sus sistemas existe un planeta con mucha masa – como Júpiter– cuya gravedad ejerce influencia sobre la estrella; con esta técnica, señaló Anahí Caldú, se descubrieron 100 exoplanetas en una década, “casi todos los planetas que se detectaron fueron ‘Júpiteres calientes”.

Así fue como en 1995 se descubrió el primer exoplaneta orbitando una estrella normal, es decir, que quema hidrógeno en su interior como el Sol.

El segundo método, el de tránsito, aumentó exponencialmente el descubrimiento de planetas fuera del sistema solar, hasta el miércoles anterior la Nasa tiene la confirmación de la existencia de 3 mil 791 exoplanetas (exoplanets. nasa.gov). La misión espacial Kepler busca desde 2009, midiendo cambios periódicos en el brillo de las estrellas que indicaría que un planeta pasó frente a ella.

“Este método nos permite estimar el tamaño de los planetas que están ahí, pero lo que a mí me parece más impresionante de este método es que cuando el planeta pasa frente a la estrella, si el planeta tiene una atmósfera, se puede ver y podemos estudiar qué elementos están presentes en atmósfera de un exoplaneta”, afirmó.

“¿Por qué buscamos exoplanetas?, por conocer el universo, pero también siempre está la búsqueda de la vida”, Anahí Caldú señaló que la búsqueda de vida se hace desde lo que la humanidad conoce por lo que se exploran planetas donde se cree que hay agua en su estado líquido.

En Próxima Centauri, la estrella más cercana a la Tierra, está uno de los planetas que son potencialmente habitables que está a 4 años luz de distancia.

“Si se empiezan a descubrir formas de vida esto también se puede usar para estudiar evolución, nosotros sólo tenemos un laboratorio de evolución que es la Tierra. Si puedes empezar a estudiar N planetas entonces estadísticamente puedes ver cuáles son las vías más factibles para la vida, qué tipo de vida se desarrolla más fácil; esto todavía es también un poco ciencia ficción porque no hemos detectado vida en otra parte del universo” explicó la astrónoma.

En el viaje, Anahí Caldú hizo una breve escala en los nuevos proyectos en la exploración del universo. Uno es la sonda TESS, sucesora de Kepler cuya misión inició en abril de 2018, con el objetivo de encontrar más planetas como la Tierra, “se espera que se descubran en dos años 20 mil exoplanetas porque va a estar viendo un área 400 veces más grande que la que vio Kepler”. Un segundo proyecto es el Telescopio JWST (James Webb Space Telescope) con espejos de 6 metros de diámetro –los de Hubble medían 2 metros– y, además de detectar tránsitos de planetas, una de las expectativas es detectar las primeras galaxias que existieron en el universo.