El Proyecto de Aplicación Profesional “Vida digital” emplea drones y sensores para evaluar el estado del ambiente y tomar decisiones a su favor.

POR GUSTAVO ABARCA

La colocación de sensores para medir la calidad del aire en el campus, en las inmediaciones del Bosque La Primavera y en algunos puntos de la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG) y el uso de drones para detectar zonas que puedan incendiarse son algunas de las acciones que el ITESO ha llevado a cabo desde el Proyecto de Aplicación Profesional (PAP) “Vida digital”.

El PAP, que se imparte desde 2014, coordinado por Luis Eduardo Pérez Bernal y asesorado por Jorge Pardiñas, quienes son profesores del Departamento de Electrónica, Sistemas e Informática (DESI), integra varios ejes de acción.

El primero de ellos está relacionado con las ciudades inteligentes, que dentro de sus características está la interacción entre diferentes disciplinas para resolver necesidades concretas, mediante la recaudación de datos, que se pueden consultar vía internet, y la interpretación de los mismos.

En el PAP han participado más de 50 estudiantes de las ingenierías Electrónica, en Sistemas Computacionales, en Seguridad Informática y Redes, y Ambiental, así como estudiantes de la Licenciatura en Diseño y de intercambio académico, provenientes de la Universidad de Málaga, España.

A partir de los datos recabados e interpretados, la intención es que se tomen decisiones, por ejemplo, tratar algún árbol, en caso de que presente alguna enfermedad, la cual se puede determinar por la humedad del suelo.

El eje temático más fuerte del proyecto es la sustentabilidad, ya que a partir de ahí se ha incrementado la realización de acciones orientadas al cuidado ambiental colaborando con diferentes instancias de la universidad como la Oficina de Servicios Generales y los departamentos del Hábitat y Desarrollo Urbano y el de Procesos Tecnológicos e Industriales, así como la asociación civil Anillo Primavera y el PAP del mismo nombre.

El campus como laboratorio
La biodiversidad del campus –3 mil 733 árboles de cerca de 254 especies diferentes– permite que el ITESO sea un laboratorio viviente donde se pueden medir recursos como temperatura o humedad de los árboles, proyectos por los que el Gobierno de Jalisco le otorgó la certificación de living lab.

El profesor Pérez Bernal, coordinador del PAP “Vida digital”, explica que los sensores colocados principalmente en el suelo donde están los árboles del ITESO miden la cantidad de ozono, monóxido de carbono, dióxido de nitrógeno, dióxido de carbono y ozono; así como la humedad relativa y temperatura.

En el caso de los que se han instalado en la planta de tratamiento de agua miden el pH –acidez o alcalinidad– y la temperatura, entre otros.

Por el momento, la tecnología más dominante en el proyecto es el llamado Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés), que permite la interconexión y el intercambio de datos entre los sensores que se han colocado en el campus, en el Bosque La Primavera y en la ZMG, y drones para la captación de imágenes.

La red de sensores cuenta hoy con cuatro nodos, los cuales están ubicados en las afueras de la Biblioteca Dr. Jorge Villalobos Padilla, SJ; entre los edificios A y B, en el Edificio T y en la planta de tratamiento de agua.

En relación con los sensores colocados en el suelo, su objetivo es “recolectar la información de la humedad del suelo del ITESO es posible identificar los riesgos de enfermedad que pudieran enfrentar los árboles”, explica el profesor Jorge Pardiñas.

Durante el ciclo escolar Primavera 2018 se continuará con la colocación de sensores fijos para abarcar más espacio en las mediciones, explica el académico.

En el Bosque La Primavera
En los terrenos que el ITESO tiene en el Bosque La Primavera, este semestre se colocarán sensores en la parte baja del predio, los cuales medirán “la humedad y temperatura del suelo. Son como los que usamos aquí. Esto se hará con la finalidad de ver si las estrategias de conservación que se han estado implementando en el predio son las adecuadas”, añade Jorge Pardiñas. Este trabajo se hace en conjunto con el proyecto “Evaluación de variables ambientales en los polígonos del ITESO en el Bosque La Primavera”, que se desarrolla desde el Departamento de Procesos Tecnológicos e Industriales (PTI).

De acuerdo con la profesora Sandra Valdés, coordinadora del PAP “Anillo Primavera”, se continuará con el análisis de los datos extraídos por los sensores ya instalados en el Bosque La Primavera, además de instalar seis más.

La profesora adelanta que se está trabajando con otros PAP orientados a la conservación del bosque, entre los que se encuentran “Bosque-Escuela” y “Vida digital, para comenzar a hacer investigaciones relacionadas con la conservación del bosque.

Una de las acciones que están dando resultados es el monitoreo de fauna en el bosque.

“Logramos captar y registrar el paso del puma. Fueron tres ocasiones el año pasado y fueron tres especies distintas de puma en fechas distintas. La última de ellas fue el 8 de noviembre”, detalla Sandra Valdés.

Otra tecnología utilizada en el proyecto, con la cual también se experimentará este semestre es con drones, ya que estos permiten hacer una recuperación de las características del suelo.

“Con el dron usamos la fotogrametría, que al procesar las imágenes se buscan las zonas verdes y aquellas que son proclives a incendios”, añade Luis Eduardo Pérez Bernal, quien comenta que la interpretación de los datos de las imágenes la harán académicos del PTI Lo que buscan es obtener información del estado de la zona para evaluar si el trabajo que se hace en materia de recuperación es adecuado, si la regeneración del suelo es acertada en cuanto a los nutrientes.

 

En la ciudad
Los proyectos del PAP “Vida digital” no se limitan a las inmediaciones del Bosque La Primavera y en el campus, también tiene presencia en otros puntos de la Zona Metropolitana de Guadalajara.

Jorge Pardiñas detalla que actualmente se cuentan con sensores que miden la calidad del aire en la zona bajío, en el cerro del Tepopote, en Tala, en las inmediaciones del Estadio Omnilife, en Las Águilas y en Toluquilla.

Además, desde el PAP se colabora en el proyecto “Sistema de pronóstico de la calidad del aire de la Zona Metropolitana de Guadalajara: Diseño e Implementación de Sensores para Internet de las Cosas”, que depende del PTI.

Se tiene un nodo en Toluquilla, cerca de donde la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial tiene una unidad de medición, esto con la intención de comparar y complementar los datos captados por el organismo gubernamental.

De los sensores utilizados en los distintos ejes de acción, algunos son comerciales y otros desarrollados desde el PAP, Luis Eduardo Pérez Bernal adelanta que en el futuro se contempla incorporar a estudiantes de Ingeniería Mecánica para diseñar y aumentar las funciones de los drones con los que trabajan.