El jueves comenzó el ciclo de conferencias “Diálogos sobre el acompañamiento al estilo ignaciano”. En la primera charla se definió qué es y cuáles son las características de este rasgo fundamental de la espiritualidad ignaciana.

Lo dijo Aristóteles en la Grecia clásica: “El hombre es un ser social por naturaleza”. Nacemos, crecemos y nos desarrollamos en sociedad. Alexander Zatyrka, SJ, retomó la idea aristotélica y señaló que “el ser humano no está en el mundo solo, nunca. Cualquier cosa que aísle a la persona o privilegie el bien personal sobre el común, no es cristiana ni ignaciana”. Por esta certeza, la de la persona rodeada de otras personas, es importante saber acompañar. Y en el caso del ITESO, en tanto universidad confiada a la Compañía de Jesús, no se trata de cualquier acompañamiento: se trata de un acompañamiento ignaciano.

Para entender mejor y saber cómo vivir el acompañamiento desde la espiritualidad de San Ignacio de Loyola, la Dirección de Integración Comunitaria echó a andar un ciclo de conferencias titulado “Diálogos sobre el acompañamiento al estilo ignaciano”. Aunque debió haber comenzado el 12 de abril, la contingencia ambiental por el incendio en La Primavera obligó a reprogramar el inicio de la actividad, cuya primera sesión se realizó el jueves 10 de mayo con José Morales Orozco, SJ, Rector del ITESO; Alexander Zatyrka, SJ, profesor del Departamento de Filosofía y Humanidades; y Gerardo Valenzuela, SJ, director del Centro Universitario Ignaciano, quienes buscaron responder a la pregunta rectora de la charla: ¿Qué es el acompañamiento al estilo ignaciano?

Para comenzar, José Morales Orozco, SJ, señaló que el acompañamiento ignaciano comienza en la experiencia misma de San Ignacio, que escuchaba a las personas que se acercaban a él y les orientaba a la luz de su experiencia, es decir, les ayudaba a discernir. Así pues, el acompañamiento ignaciano se puede definir como “acompañar a otras personas para que descubran la voluntad de Dios en su vida y en el análisis de la realidad”. Para esto, complementó Alexander Zatyrka, SJ, es necesario echar mano del llamado “sentir ignaciano”, que tiene tres referentes principales: el intelectual, ya que no se puede orientar sin entender; el afecto, ya que no sólo basta entender, sino querer; y la paz y la armonía interior. Estos tres factores, añadió, son fundamentales al momento de tomar decisiones.

Otro aspecto indispensable en el acompañamiento ignaciano es el respeto por la individualidad del acompañado. Gerardo Valenzuela, SJ, puntualizó que la propuesta es que “quien es acompañado recupere su propia experiencia”, mientras que el acompañante ha de “conocerla para aprender de ella”. En este aspecto, completó el Rector, José Morales, SJ, es necesario acudir a la otra persona sin prejuicios y creyendo en su palabra, así como “saber distinguir las diferencias entre los acompañados. Hay que tratar de diferente manera a los diferentes y respetar profundamente las decisiones de cada persona”. Y es que, redondeó el profesor Zatyrka, SJ,  quien acompaña ignacianamente ha de entender que se trata de algo formativo y propositivo y no meramente informativo o como si se estuviera dando un instructivo qué seguir. Y añadió: “El respeto de la libertad y la voluntad es fundamental. El devenir humano no es un proceso, porque está la libertad de por medio. En todo caso, hay itinerarios”.

Otra de las características del acompañamiento ignaciano es que debe ser “encarnacionista”, es decir, ha de cristalizarse en la persona. Alexander Zatyrka, SJ, lo explicó diciendo que el acompañamiento debe ayudar “a que la gente vea su vida y su relación con Dios desde lo que siente, no sólo desde lo que piensa”; el Rector dijo que es “encontrar a Dios en todas las personas, en el más necesitado, y no rehuir de la realidad”; y Gerardo Valenzuela, SJ, añadió que es importante “mirarnos unos a otros, confiar en el otro. Para acompañarnos ignacianamente en la Universidad hay que mirarnos, confiar y así construir juntos”.

El ciclo de conferencias “Diálogos sobre el acompañamiento al estilo ignaciano” estará compuesto por cinco conferencias. La segunda tendrá lugar el próximo 17 de mayo a las 9:00 horas en el Auditorio W.