En el Proyecto de Aplicación Profesional Comer convoca se aborda el concepto de soberanía alimentaria desde la vinculación con distintos proyectos de nutrición comunitaria

Por Andrea Cajiga Fornelli/ Comunicación Cifovis

Comer Convoca, acción social para entornos saludables, es el Proyecto de Aplicación Profesional (PAP) coordinado por el académico Paulo Orozco Hernández en el que se busca avanzar hacia la plena realización del derecho humano a la alimentación adecuada.

En este PAP se aborda el concepto de soberanía alimentaria, el cual propone que las decisiones alimentarias las tengan los productores y los consumidores y no la industria o el gobierno. Comer Convoca se vincula con distintos proyectos de nutrición comunitaria para resolver necesidades con este enfoque en mente.  

Cada organización y proyecto tiene necesidades distintas que se abordan a partir de los enfoques de los estudiantes dependiendo de su carrera. Se trabajan desde cuestiones de investigación-acción participativa hasta la generación de material gráfico-audiovisual, pero el objetivo principal se mantiene en la vinculación con las organizaciones para avanzar en conjunto hacia el derecho humano de la alimentación adecuada y la soberanía alimentaria.

Paulo menciona que actualmente se está generando material gráfico y audiovisual para promover cooperativas de consumo y productores agroecológicos.

Leopoldo Ramos Vargas, alumno de la carrera de Nutrición y Ciencias de los Alimentos, comparte que en el PAP “diseñamos cápsulas en video en las que hablamos con el productor para hacerlo protagonista y vincularlo con la gente, además creamos rapport para que las personas sepan de dónde vienen sus alimentos y cuáles son los procesos para que lleguen a la mesa. Después hacemos un video de cocina con los alimentos del productor donde pretendemos que no sólo aprendan a cocinar, sino que de manera simple reconozcan procesos de desinfección, selección y preparación del alimento”.  

Este PAP está vinculado con varias organizaciones en Guadalajara como la Cooperativa de Consumo Consciente MILPA o el Mercado Agroecológico El Jilote. Por otro lado, también han trabajado con organizaciones en estados como Nayarit: Hemos ido a trabajar con organizaciones en San Pancho para generar programas de educación en alimentación. Parte de la experiencia que pueden tener los estudiantes es trabajar en un equipo multidisciplinario para incorporarse a proyectos reales y abonar a una alimentación más justa, consciente y con enfoque de derechos. Independientemente de la carrera en que estés puedes abonar al objetivo de comer mejor”, menciona el profesor Orozco.  

Gran parte del valor en este tipo de experiencias está en que todos pueden acceder y vincularse con proyectos y necesidades reales. Comer Convoca no genera proyectos, sino que se vincula con organizaciones o proyectos de investigación ya existentes para que los alumnos se inserten en escenarios reales de acción.  

Leopoldo reconoce que estos últimos PAP se han visto marcados por la virtualidad, pero afirma que aun así se pudieron crear lazos entre productores, estudiantes y consumidores. Agrega también que su participación se basó en brindar alternativas de platillos elaborados con alimentos de productores locales que estuvieran vinculados a la cooperativa; “buscamos que las personas aprendan a cocinar con alimentos comunes para rescatar las técnicas tradicionales de la cocina mexicana y evitar el desperdicio del alimento”, agrega.  

Actualmente, Comer Convoca trabaja en un proyecto de estancias colaborativas o turismo rural para productores de alimentos agroecológicos en Jalisco. En él están vinculados alumnos de nutrición y turismo. 

“Reconocimos la necesidad de que gente de la ciudad y de otras partes fueran a conocer los ranchos de productores. Al trabajar con cooperativas de consumidores y productores agroecológicos estamos abonando a que más personas en la ciudad tengan acceso a alimentos limpios, saludables y justos. Por eso el impacto de este PAP se refleja en que las personas de la ciudad puedan comer mejor a través del trabajo con estas instancias”, explica el profesor Orozco. 

Comer Convoca es un buen primer acercamiento a la vida profesional para salir del contexto escolar pues, a pesar de que siguen siendo ambientes relativamente controlados donde los profesores juegan el rol de facilitadores y asesores, a los estudiantes se les considera parte de un equipo de profesionistas que va y trabaja para resolver necesidades.  

En este PAP en particular los estudiantes comprenden un modelo nuevo de alimentación que es distinto al modelo agroindustrial. Un modelo necesario para la salud, el bienestar social, y para atender problemas estructurales y actuales como el calentamiento global, abordado de forma crítica con trabajo horizontal y desde la base.  

La diferencia entre una nutrición consciente y deficiente está en preguntarnos qué y por qué estamos comiendo lo que comemos. Para los interesados en el proyecto Leopoldo menciona que si tienes interés en conocer el alimento desde su origen, este es el PAP adecuado. Un espacio para generar consciencia sobre lo que comemos y cómo lo cocinamos que te ayudará a conocer el alimento en su faceta más noble y versátil para hacer una buena recomendación nutricional”.   

“Aún existen personas que se preocupan por lo que se lleva a la mesa y que trabajan la tierra de manera consciente para el bien de todos. Esta forma de ver la gastronomía y la nutrición es una de las cosas más importantes para mi futuro profesional”. Leopoldo, alumno participante en Comer Convoca.