El nuevo Plan de Movilidad Sustentable está en camino de ser una realidad con la finalidad de atender las necesidades de transporte de la comunidad universitaria que se traslada hacia y desde el campus

Hace 20 años una camioneta tipo van salió de las puertas del ITESO con destino a la avenida Colón, a la estación del tren ligero. Comenzaba así una historia que hasta marzo del año pasado se escribía en dos rutas —Colón y Las Fuentes—, 56 viajes y 36 mil usuarios al mes. Fue el primero de muchos pasos que ha dado la Universidad para mejorar las condiciones de traslado de la comunidad universitaria, una comunidad que vive mayoritariamente en Guadalajara y tarda en promedio 40 minutos para llegar al campus, que se traslada sobre todo en auto particular, mientras quienes usan el transporte público invierten entre 25 y 50 pesos para trasladarse.  

Estos son algunos datos que se han podido recabar a través de la encuesta sobre Movilidad Integral del ITESO, aplicada a toda la comunidad universitaria y que es el primer paso en el diseño del nuevo Plan de Movilidad Sustentable, con el que la Universidad busca mejorar las condiciones en las que las personas se trasladan hacia y desde el campus. 

“Ahora estamos en la etapa de las preguntas. Nos encontramos ante una oportunidad fascinante de obtener respuestas, de saber cómo nos movemos y analizar las opciones que tenemos a futuro con una base firme, no desde un horizonte imaginativo”, dice Homero Apodaca, director de la Oficina de Compras del ITESO, y añade que uno de los objetivos es hacer un análisis a conciencia de la información que se recabe para “definir criterios, estrategias y acciones que nos permitan ofrecer una respuesta eficaz, creativa e innovadora”.  

Una de las cosas que se buscaban con la encuesta era saber desde y hacia dónde se traslada la comunidad universitaria, en qué se mueve, qué tanto se utiliza el transporte universitario, cuántas personas usan bicicletas, qué hacen durante el trayecto quienes usan el transporte público, cuántas veces a la semana vienen al ITESO. 

Con base en las respuestas, en cuyo análisis está colaborando el Departamento del Hábitat y Desarrollo Urbano (DHDU), se buscará determinar en qué es mejor invertir los recursos de la Universidad: ampliar las rutas del transporte universitario, renovar la flotilla para hacerla más sustentable, trabajar en ciclovías, acoplarse al proyecto de Mi Macro Periférico, así como definir prioridades para abonar en la búsqueda de una movilidad más integral y más sustentable. El objetivo es atender la mayor cantidad posible de variables.  

“Todos nos movemos distinto para llegar y salir del ITESO, y lo que queremos es generar alternativas de solución que nos sirvan al largo plazo. ¿Cómo nos vamos a mover en 2030? Queremos diseñar una plataforma que nos permita tener información que se actualice constantemente para atender la demanda. La sociedad requiere más modelos de movilidad, pero que sean realistas”, dice Homero Apodaca. Y pone como ejemplo la ruta 3 del transporte universitario, que está en su fase piloto y que dará cobertura a la zona sur. 

Una vez finalizada la encuesta de movilidad, el 27 de agosto, vendrá el periodo de análisis de la información con la intención de que el 1 de octubre esté lista la propuesta del Plan de Movilidad Sustentable.  

Homero Apodaca, director de la Oficina de Compras del ITESO.

FOTO: Luis Ponciano