Tener la capacidad de llegar a un lugar y mejorar lo que allí encuentras ha sido una de las principales cualidades de la labor profesional realizada por el editor y promotor cultural Juan Francisco González, afirmó el doctor Alfonso Alfaro, director de investigaciones de la revista Artes de México durante el reconocimiento que se le hizo a González la noche del 16 de mayo en la Casa ITESO Clavigero.
La actividad, en la que estuvieron presentes exfuncionarios y personas que acompañaron a González en distintas etapas de su trayectoria profesional, fue organizada conjuntamente por la Dirección de Integración Comunitaria del ITESO y la Fundación de Arquitectura Tapatía Luis Barragán.
El reconocimiento, entregado por el presidente de la fundación Armando Chávez, y por el director de Integración Comunitaria del ITESO, Juan Carlos Núñez, se hizo por una trayectoria de más de 40 años en el ámbito de la cultura, caracterizada por el rescate del patrimonio jalisciense a través, por ejemplo, de las gestiones para adquirir y restaurar la finca conocida como “La Moreña”, ubicada en La Barca, Jalisco, o la compra que se hizo de la casa en Tacubaya (Ciudad de México) del célebre arquitecto tapatío Luis Barragán.
En su habitual tono ameno, el investigador y escritor Juan José Doñán hizo una semblanza de González, en la que relató las acciones que contribuyeron a robustecer la vida cultural del estado. Entre ellas nombró la fundación del Departamento de Bellas Artes de Jalisco, que derivó después en la actual Secretaría de Cultura, de la cual fue su primer titular, de 1992 a 1995. También participó en la fundación de la Unidad Editorial del Gobierno de Jalisco y en la Galería Municipal de Guadalajara.
Para dar un ejemplo de la calidad y variedad de las actividades que se realizaron en la entidad durante el tiempo en que González tuvo a su cargo el Departamento de Bellas Artes, Doñán mencionó que en un mismo mes se presentaron el músico hindú Ravi Shankar; la London Symphony dirigida por Eduardo Mata; el Ballet de Senegal y el pianista de jazz Bill Evans.
Respecto a las gestiones para adquirir la casa de Barragán en la Ciudad de México, Juan Palomar, vicepresidente de la Fundación en Guadalajara, destacó la importancia de creer en lo “impensable”, pues sobre todo en esos años no podía imaginarse que un gobierno estatal tuviera a su cargo una propiedad en la capital destinada a la difusión del patrimonio local. Palomar mencionó que actualmente esa Casa Museo recibe a miles de visitantes anualmente. En la mesa principal estuvo también Juan Enrigue, secretario de la Fundación de Arquitectura Tapatía Luis Barragán.
El homenajeado agradeció el acto recordando que siempre estuvo rodeado de personas que hicieron posible alcanzar los logros alcanzados; la celebración se cerró con música en vivo a cargo de la agrupación Impro7. Texto Alejandra Ruiz Foto Promoción Cultural ITESO