El ciclo de charlas Pensamiento Jesuita sobre la actualidad cerró el periodo de Primavera 2017 conversando con Javier Martínez, SJ.
“La condición humana es más fácil de percibirla a través de la literatura, de las humanidades”, afirmó Javier Martínez, SJ, y recordó obras como El otoño del patriarca de Gabriel García Márquez o El recurso del método de Alejo Carpentier que “cada uno a su modo representan ese modo de ser del hombre cuando se llena de poder, cómo actúa, cómo se destruye”.
La literatura y otras áreas de las humanidades, fueron parte central de su formación como jesuita del profesor de los departamentos de Estudios Socioculturales y de Filosofía y Humanidades, una formación humanista que Javier Martínez considera de gran importancia.
“Era una formación para desarrollar al hombre, todos necesitan desarrollar su persona primero”, y aludiendo a sus años como escolar jesuita añadió: “luego ya vendrán la filosofía para crear un sistema que lo ayude a pensar, argumentar a tener ideas propias y luego la teología como sacerdotes para tener la base para poder comunicar la palabra de Dios”.
Javier Martínez, SJ, fue el encargado de cerrar el jueves 18 de mayo el ciclo de Pensamiento Jesuita sobre la actualidad del semestre Primavera 2017. En la charla que llevó el nombre “Un jesuita en el campo de las letras”, exploró los cambios en la formación de jesuitas desde que él llegó a la Compañía de Jesús.
“Cuando entré a la compañía los 2 primeros años estaban dedicados principalmente al desarrollo del espíritu”, recordó. Las bases de sus estudios eran, primero, la gramática española y griega; después aprendían latín y griego, y a desarrollar el español, “es decir, meternos a lo más profundo de lo que es la lengua y luego, a través de la lengua, la literatura”.
El latín, señaló Javier Martínez, SJ, era la lengua con la que estudiarían durante 15 años las clases de filosofía y teología.
El también ex director del programa para Hispanoamérica de la Radio Vaticana relató que sus profesores llegaron al ITESO, en específico a la carrera de Ciencias de la Comunicación que se fundó en 1967 con la intención de fortalecer sus primeros años, como José Sánchez Villaseñor, SJ, el padre Juan José Coronado, SJ, o Xavier Gómez-Robledo, SJ, quienes eran especialistas en latín, griego y oratoria.
“Cuando ya había terminado mis estudios las cosas cambiaron, se vio en aquel momento que las ciencias sociales tenían mucha importancia, entonces se fue quitando importancia a las humanidades”.
Ahora, quienes ingresan a la Compañía de Jesús tienen un perfil distinto a cuando él ingresó, “muchos ya tienen un título académico o tienen otra experiencia de vida; es otra manera de percibir los candidatos y es otra formación la que se da”, dijo.