Se entregó por primera vez la Medalla Manresa, considerada el máximo reconocimiento de la Prepa ITESO, al egresado Alan Enrique Soto Sandoval
Por primera vez, los birretes de la Prepa ITESO fueron lanzados al aire. La primera generación, conformada por 178 estudiantes, ha egresado.
Reunidos con sus familias en el Auditorio Pedro Arrupe, SJ, la mañana del 21 de junio de 2024, los graduandos lucían sus togas y esperaban sonrientes el momento de pasar al frente para recoger el diploma que fuese testigo de su esfuerzo durante los últimos tres años.
Alexander Zatyrka Pacheco, SJ, rector del ITESO, invitó a los y las jóvenes a cultivar el amor, ese que “transforma, redime y nos hace crecer y vincularnos fundamentalmente con algo más grande que nosotros y nosotras mismas, en un encuentro que nos llame a involucrarnos con otras personas. Es el amor el que nos mueve a entregar lo mejor que tenemos y a asumir desde la fe, la justicia y la solidaridad nuestra responsabilidad con el cuidado de la casa común y de quienes la habitan”, dijo.
Los retó a continuar cuestionando, explorando y creciendo en su comprensión de lo divino y lo trascendental, para beneficio propio y de quienes los rodean.
Reconoció que, como primera generación, dejan en Prepa ITESO una herencia marcada por su dedicación, determinación, alegría y espíritu de comunidad, presente en caminos que quienes vienen detrás de ellos habrán de recorrer.
Asimismo, agradeció a las familias por el apoyo inquebrantable y la confianza de permitir al ITESO acompañarles en el trascendental proceso de formación de sus hijas e hijos, más aún desde un proyecto que iniciaba en medio de una pandemia, y con toda la novedad e incertidumbre que representaba ser la primera generación.
Carlos Jesús Araujo Torre, director de Prepa ITESO, confesó que este era un día que imaginaba ya desde enero de 2020, cuando se le dio la encomienda de liderar este proyecto educativo. Sin embargo, todo lo que pasaría entre ese entonces y la graduación de la primera generación, lo ha tomado por sorpresa.
“Al principio imaginé muchas cosas, pero ustedes lo han superado todo. Ustedes nos han marcado con autenticidad lo que significa ser con los demás. Estamos profundamente agradecidos por todo lo que nos han dado”, dijo.
El director afirmó que la Prepa ITESO es un espacio en el que se concreta privilegiadamente una de las consignas fundamentales de nuestro carisma ignaciano: la de en todo amar y servir. En esa línea, reconoció a todo el equipo administrativo, de servicios de apoyo, académico y de asignatura que forma parte de este proyecto.
Mención especial merecieron Guadalupe Valdés Dávila, Bernardo Cotero Ochoa y Juan Enrique Casas Rudbeck, SJ, quienes, junto con Araujo Torre, comenzaron a diseñar los cimientos de este proyecto que al día de hoy es centro formativo de más de 600 jóvenes.
Más que invitarlos a hacer de este un mundo mejor, Araujo Torre invitó a los graduandos a reflexionar cómo es que ya lo hacen: “¿Se dan cuenta de su capacidad para transformar el mundo? No es una idea, no es una utopía, ustedes ya hacen mejor el mundo. Con esta fuerza, creatividad, sensibilidad y pasión, acérquense a los contextos en que se viven los efectos de la desigualdad. Es ahí donde realmente se construye un mundo distinto”, mencionó.
Reconocimientos
La propia comunidad de estudiantes graduados, así como el equipo de formadoras y formadores de Prepa ITESO, resolvieron entregar una serie de reconocimientos a los y las estudiantes más sobresalientes en ciertas áreas. Es así que Andrés Juárez, Diego López Ramírez y Sofía del Río Celaya recibieron los reconocimientos académico, deportivo y por participación estudiantil, respectivamente.
El reconocimiento artístico lo obtuvieron los integrantes del grupo de música de Prepa ITESO, Maya Angela Webb Zulaica, Mariana Arámbula Torres, Lucio Ramón Legaspi Jiménez, Mauro Gámez Vázquez, Mariano Calderón Sierra y Óscar Crespo Limón.
En tanto, Pedro Abraham Chávez Ortega; Mariana Chávez Torres; Regina Rendón Iturbide y Alan Enrique Soto Sandoval recibieron sendas becas de excelencia humana para continuar con su formación universitaria en el ITESO.
Por primera vez se entregó la Medalla Manresa, mayor reconocimiento que otorga Prepa ITESO y pensado para el o la estudiante en quien la comunidad haya visto un proceso de crecimiento personal, ya sea en lo espiritual, lo afectivo, o lo social, manifestado en la vivencia de la consigna ignaciana de En Todo Amar y Servir.
Lleva el nombre de Manresa por ser este el lugar en el que San Ignacio de Loyola vivió un momento fundante en su proceso de conversión y su llamado a transmitir, a través de los ejercicios espirituales, su experiencia del amor de Dios. Alan Enrique Soto Sandoval fue quien, a consideración de la comunidad de Prepa ITESO, mereció este reconocimiento.
Prepa ITESO, convertidos en una familia
Julio Alberto Morales Álvarez, egresado de Prepa ITESO, habló a nombre de sus compañeros y compañeras de generación. Recordó aquel lejano primer día en agosto de 2021, en el que se encontró con decenas de personas que sólo mostraban medio rostro (recordar que la pandemia obligaba al uso de cubrebocas) y con quienes sólo los hermanaba un uniforme, la edad, y la coincidencia de estar en Prepa ITESO.
“Hoy veo el rostro de estos mismos desconocidos y sonrío. Porque en lugar de ver timidez en sus ojos, veo recuerdos y vivencias. Y aunque ellos no lo saben, esos desconocidos se convirtieron en mi hogar y en mi familia”, afirmó.
Coincidió en ello Sofía del Río Celaya, también graduada de Prepa ITESO, quien señaló que este día se cerró uno de los capítulos más bellos de las historias de cada uno de los graduados.
“Prepa ITESO nos ha mostrado que el error más grande que puedes cometer es no intentarlo, que nuestros talentos se convierten en habilidades cuando los ponemos al servicio de otros, que a veces hay que perderse un poco para volver a encontrarse. Que en un amigo puedes encontrar familia, que a veces debes alejarte de lo que otros esperan de ti para descubrir de lo que eres capaz, y que la grandeza no está en el mérito, sino en el espíritu”, dijo.
En tanto, Andrés Muñoz Ibarra, padrino de la primera generación de egresados de Prepa ITESO, invitó a sus ahijados a nunca perder su curiosidad y capacidad de asombro. Recordó las palabras de San Ignacio: “el amor se ha de poner más en las obras que en las palabras”, para exhortarlos a construir un mundo más congruente, más consciente, más cuidado y con más amor, desde las acciones diarias.
Durante la ceremonia de terminación de estudios estuvieron presentes Fanny Guadalupe Valdivia Márquez, subsecretaria de educación media superior de la Secretaría de Educación Jalisco; y María Antonia García Sanjinés, secretaría ejecutiva de la Red de Colegios Asociados Jesuitas, en representación de la Mtra. Lorena Giacomán Arratia, asistente de Educación de la Compañía de Jesús.
Así también Guillermo Alejandro Gatt Corona, presidente de ITESO A.C.; Humberto Orozco Barba, director de Relaciones Externas del ITESO; Carlos Aguayo Castanedo, coordinador académico; Paulina Valdez Robles, coordinadora de formación humana y Claudia Alcocer Yáñez, coordinadora de acompañamiento psicopedagógico de Prepa ITESO.
FOTOS: Zyan André