Enrique Ochoa es el nuevo jefe del Departamento de Estudios Políticos y Jurídicos del ITESO (SOJ), relevando en el cargo a Carlos Moreno Jaimes, quien completó seis años de gestión.
Darle seguimiento a la renovación y posicionamiento de siete programas académicos (tres licenciaturas y cuatro posgrados), impulsar la investigación con pertinencia social y crear un clima de colaboración y trabajo multidisciplinario, son algunos de los encargos que tendrá durante un año Enrique Ochoa, nuevo jefe del Departamento de Estudios Sociopolíticos y Jurídicos del ITESO (SOJ), quien sustituye en el cargo a Carlos Moreno.
Fue al mediodía del miércoles 11 de junio en el Auditorio M cuando la universidad hizo oficial el relevo, mediante un acto al que acudieron el jefe entrante y saliente, acompañados por Gisel Hernández, directora general académica y Juan Luis Orozco, SJ, Rector de esta Casa de estudios, así como por medio centenar de colegas, amigos e invitados especiales.
Moreno aseguró que fue “un privilegio” haber sido jefe del SOJ (2008-2014) e hizo un breve recuento de los principales logros de su gestión: se fortaleció la capacidad de gestión, la transparencia y rendición de cuentas del departamento; se emprendió un cambio generacional de la plantilla docente con la incorporación de jóvenes profesores con experiencia y formación nacional e internacional; se logró la acreditación de todas las licenciaturas y se estableció un sólido Programa Formal de Investigación.
El SOJ tiene a su cargo las licenciaturas de Derecho, la de Ciencias Políticas y Gestión Pública y la de Relaciones Internacionales, así como las maestrías en Política y Gestión Pública, Derecho Constitucional Contemporáneo, Derechos Humanos y Paz y el Doctorado Internacional en Bienestar Social, que el ITESO imparte conjuntamente con el Boston College.
En su primer discurso como jefe del SOJ, Ochoa –quien anteriormente se desempeñó como contralor en aspectos normativos del ITESO– puso énfasis en la institucionalidad que permeará los 12 meses que, en principio, durará su gestión.
“Nada se dejará para después; lo que toque hacer se hará y no habrá aplazamientos ni moratorias. Este año no será paréntesis, ni intervalo, ni pausa”, señaló Ochoa, quien al referirse a las investigaciones y a los Proyectos de Aplicación Profesional que dependen del SOJ, apuntó:
“[La investigación] debe proponerse ir más allá de los círculos académicos y tratar que sus resultados repercutan en la calidad de vida de la gente, especialmente de los más necesitados. Impulsaré, aún más, la elevación del nivel académico de los programas educativos de licenciaturas y maestrías; insistiré en promover los ajustes necesarios para posicionarlos mejor, ante nosotros mismos y ante la sociedad”.
Al igual que Moreno y Ochoa, el Rector del ITESO alabó el esfuerzo colectivo de profesores y personal administrativo a la hora de construir un departamento diverso, eficaz y capaz de dar excelentes resultados.
Orozco reiteró los beneficios que han traído al departamento los jóvenes profesores, quienes “han contribuido a revitalizar el proyecto de trabajo de la dependencia”, además de reconocer como importantes logros en el último sexenio el fortalecimiento de las Unidades Académicas Básicas –citó el caso de la de “Innovación jurídica”– y la apertura dos nuevos posgrados: la Maestría en Derechos Humanos y Paz y el citado Doctorado Internacional en Bienestar Social.
Los tres, Moreno, Ochoa y Orozco, apuntaron que el SOJ seguirá poniendo especial atención al Centro Ignacio Ellacuría, SJ, el bufete de asesoría jurídica para personas con escasos recursos que el ITESO financia desde 1998.
Con sedes en Zapopan y Guadalajara, el centro tiene entre sus objetivos “generar mejores condiciones de justicia social y equidad”, así como “alentar la formación de una sociedad poseedora de una nueva cultura política donde se respete la ley, se promueva la participación y tengan vigencia las libertades y los derechos”. Texto Enrique González Foto Roberto Ornelas