Durante la presentación del libro «Mextilo, memoria de la moda mexicana», organizada por la Licenciatura en Diseño de Indumentaria y Moda del ITESO, Gustavo Prado, autor de la obra, destacó que la moda debe ser un reflejo del contexto en el que se vive.
La moda en México tiene un estilo particular: cada 10 años las marcas se extinguen, no se puede esperar que alguna sobreviva a la muerte de su fundador como sucedió con las firmas Dior o Chanel, señaló Gustavo Prado en la presentación de su libro Mextilo, memoria de la moda mexicana.
En la actividad, llevada a cabo el 7 de junio pasado y organizada por la Licenciatura en Diseño e Indumentaria y Moda del ITESO, Prado aseguró que a la industria de la moda mexicana le falta desarrollarse, y tomó como ejemplo el caso de Ramón Valdiosera, a quien nombró como el padre de la moda en México, quien murió en abril de este año.
“Si nosotros tuviéramos un movimiento de moda maduro todavía existiría la marca y sería increíblemente honorable casarse con un Valdiosera del nuevo diseñador de la marca”, destacó Prado.
Mextilo es la primera publicación que documenta la historia, los estilos, las influencias de la moda en el país, desde el mundo prehispánico hasta la actualidad y en su presentación.
Otro problema que enfrenta la industria de la moda es que en México se le considera como algo “vergonzoso”, a decir de Prado, y remarcó que los museos sólo han montado exposiciones sobre el tema en 26 ocasiones.
Esta situación contrasta con casos como el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York el cual es sostenido económicamente por el Costume Institue y su presupuesto anual se aproxima a los 300 millones de dólares.
Moda, realidad e identidad
Una camiseta negra con la bandera de México cuyos colores verde y rojo fueron sustituidos por el negro, como si estuviera de luto, fue usada por asistentes a las marchas de Ayotzinapa, es una prenda que fue diseñada por la marca mexicana Sacrifice Street Wear.
Este fue uno de los ejemplos que Gustavo Prado dio al afirmar que México debería inspirarse en su entorno, no como una falta de respeto, sino como una adecuación a la realidad.
“Lo que tiene que hacer la moda es permitirte vestirte de la identidad que tienes y de la que quieres. La moda te debe dejar expresar tus culpas, gustos y tus deseos, la moda te tiene que liberar, la moda te tiene que hacer más propositivo, más contestatario, todos esos valores están puestos ahí”.
Sobre las voces que defienden la identidad o las tradiciones mexicanas, el investigador apuntó que las tradiciones ya fueron cambiadas y tocadas por la modernidad. Al respecto hizo referencia a los indígenas mazahuas que van a trabajar a la Ciudad de México que adoptaron varias identidades de la ciudad y que siguen escuchando su música tradicional, a quienes el fotógrafo Federico Gama llamó “mazahuacholoskatopunks”.
También, habló de la evolución del traje de tehuana que dejó su patrón gemoétrico por formas más occidentales y que en 1950 estos vestidos eran hechos con textiles británicos.
¿Qué hay hoy?
En Mextilo también se da cuenta de lo que está sucediendo en el ámbito de la moda en México con diseños como los ponchos de la marca Pay’s o la chamarra “México is the shit” del diseñador Anuar Layón.
“Son gente joven que le está enseñando a los grandes a hacer industrias de moda que se construyen en uno o dos años a través del internet”, dijo.