La universidad recibió a expertos nacionales e internacionales del mundo de la moda y el visual merchandising.

Seguramente  entraste  a  una  tienda  nada  más  porque  te  llamó la atención la manera en  la  que  el  aparador  estaba  dispuesto  y  por  alguna  razón  pensaste:  ‘esta  tienda  es  como  para  mí’. Sobre esto trató el 4to Visual Merchandising Workshop Latinoamérica, que se llevó a cabo durante el  6  y  el  7  de  junio  pasados,  con  ponentes y asistentes de Estados Unidos, España, Brasil, Colombia, Perú, Ecuador y México.

Blanca Robles, profesora de materias de moda y diseño de las carreras de Diseño y de Diseño de Indumentaria y Moda del ITESO, fue quien gestionó que la universidad fuera sede de esta actividad mundial en el que, además de escuchar sobre el presente y el futuro del también conocido como marketing de punto de venta, los asistentes se vincularon en redes de trabajo.

Visual merchandising, explica, tiene que ver con lo que el consumidor experimenta al entrar a un punto de venta, qué comunican los escaparates y cómo el mobiliario, además de los maniquíes y la mercancía, persuaden al consumidor para llevarlo a hacer una compra.

“Creo que es un área de oportunidad para la gente que está en el ámbito de la indumentaria y moda. De hecho, cuando diseñamos el programa de la carrera, incluimos materias de visual merchandising, porque es una ventaja competitiva frente a otras universidades a nivel nacional que no tienen ese enfoque”, menciona la profesora.

Una de las conferencias con mayor asistencia fue la de Disruption in fashion retail, impartida por el español Francisco López Navarrete, experto en moda de lujo y asesor de empresas en fashion&design strategy, que son las nuevas tendencias y formas de interpretar la información. Trabaja con la Universidad Complutense para impulsar la plataforma Mindway, de la que es CEO y que se enfoca en la innovación y estrategia en moda y diseño.

Mindway funciona como un ecosistema en el que están involucradas las y los universitarios, la industria y quien consume. A través de la vinculación de sus saberes crean escenarios de experimentación que les permiten innovar con la información que tienen disponible.

La tecnología ha ido cambiando como el comercio al menudeo y  la  manera  en  la  que  la  gente  compra. El proceso de adaptarse a estos cambios y generar valor para el consumidor es innovar. La disrupción en este ámbito, explicó, es  cómo  interpretar  indicadores  y  cómo  experimentar  con  ellos  para crear un estilo de vida y experiencias que los consumidores quieran vivir.

“La clave está en cómo interpretamos y entendemos el entorno, abrirnos a la innovación y a la experimentación, mirando hacia el futuro, entendiendo cómo cambia el entorno y las pautas de consumo. Todo esto es cuantificable”, subrayó.

Recuerda que puedes tomar cursos de otras carreras como área complementaria, dale un vistazo a la oferta de Diseño y de Diseño e Indumentaria y Moda.