En la primera semana de Gestión Pública y Derecho del ITESO se realizó el Panel Tramas de corrupción: aspectos jurídicos y políticos
POR ANDREA LANDEROS CRUZ
Dos de los términos que más conocemos y escuchamos en la actualidad son los de corrupción y anticorrupción, temas que abordó la primera semana de Gestión Pública y Derecho del ITESO.
La importancia de investigar la corrupción como una trama en la que se analizan las personas que son partícipes, su modo de operación y los retos que las instituciones tienen para resolver el problema fueron el centro del panel ‘Tramas de corrupción: aspectos jurídicos y políticos’ del martes 24 de septiembre.
Jorge Ventura, contralor del Sistema Anticorrupción de Jalisco, explicó que en realidad no hemos entendido por completo lo que significa la palabra corrupción, que este concepto aún está en proceso de discusión y construcción. Para él, la corrupción es una red, un conjunto de relaciones objetivas, subjetivas, estructuradas y estructurantes de líneas, vínculos, lazos y actividades que se sostienen entre agentes de forma tácita y expresa para obtener beneficios en abuso de poder y/o un fraude de ley.
Añadió que uno de los principales problemas para aproximarnos a entender las redes de corrupción es que son mutables y operan de distintas maneras con el paso de los años, por lo que no es lo mismo una red de corrupción de los años 50 a una red de la actualidad. “Se ha venido dando una evolución yo diría reactiva, pues se han ido tapando ciertos huecos legales de los cuales se valían algunos agentes para realizar actos hechos ilícitos que podemos enmarcar dentro de la esfera de la corrupción”.
Otra de las problemáticas es que, en muchas ocasiones, los servidores públicos o la misma ciudadanía no son conscientes de que están inmersos en una red de esta índole. Jorge Ventura explica que son pocas las personas que han sido sancionadas al ser descubiertas participando en actividades ilícitas.
Lucía Almaraz, integrante del Comité de Participación Social del Sistema Anticorrupción del Estado de Jalisco, comenzó su participación definiendo que cuando se hablan de tramas de corrupción se tiene que considerar que, a veces, no solo es un delito el que se está cometiendo, sino varios.
“Es importante considerar que los grados de participación son diversos, ya lo comentaba Jorge, que son varios los agentes que se ven involucrados en la trama de corrupción, con diferentes grados de participación desde quienes lo saben, el autor intelectual, autor material, el cómplice, el encubridor, entre otros” y agregó que “el ministerio público deberá de obtener información suficiente [considerando esta trama de corrupción] para que se convierta en datos de prueba, es decir que este dato de prueba deberá ser lo suficientemente fuerte para sostener una imputación y en su caso una acusación que pue-da vincularlos a proceso’’.
La recopilación de datos es la única inteligencia, asegura Lucía Almaraz, pero lamenta que en Jalisco estamos lejos de cumplir con aspectos básicos como el cotejo, el análisis propio de la información, la retroalimentación y la difusión. Para la especialista es fundamental seguir la ruta del dinero y para esto se necesita contar con una unidad de inteligencia. “La Reforma 2.0 del Sistema Estatal Anticorrupción propone la creación de la unidad de inteligencia, que nos permita seguir la ruta del dinero y con ello, la recuperación de activos, es decir, no solo es perseguir el dinero, sino que también es saber el destino final del dinero, en qué o quién se quedó”.
Enrique Aldama López, Contralor Ciudadano de Guadalajara, mencionó que el escándalo de La Casa Blanca, publicado en un reportaje en noviembre de 2014, fue un parteaguas para que en mayo de 2015 se publicara la reforma constitucional que dio vida al Sistema Nacional Anticorrupción, como instancia de coordinación entre autoridades de todos los órdenes del gobierno y que puso a la sociedad civil al centro de la toma de decisiones de la materia, reconociendo la responsabilidad de servidores públicos y también de particulares, personas físicas y jurídicas.
Enfatizó que, una vez que las tramas de corrupción son descubiertas, los órganos internos de control tienen el deber de promover medidas preventivas y correctivas para que el acto no vuelva a repetirse.
María Teresa Brito, Contralora del estado de Jalisco, apuntó que ya no hay corruptos solitarios, la trama de la corrupción se ha sofisticado y encontrado mecanismos para cometer fraudes, pero el sistema anticorrupción es conocido y las leyes ya están puestas, lo que toca es ser constantes en seguirlas y prevenir.