Hace un par de semanas, unos tutús rosas que rodeaban los árboles del ITESO atrajeron la atención de muchos estudiantes que al pasar se detenían a observarlos.
Días después, a los tutús se les añadieron las invitaciones a la presentación final de los talleres de danza del ITESO, espectáculo que se llevó a cabo en el Auditorio Pedro Arrupe, SJ el martes 19 de noviembre y en el que los estudiantes de las asignaturas de danza clásica y contemporánea y “Danza, cuerpo e historia”, presentaron lo que han aprendido a lo largo del semestre.
Con todos los asientos ocupados por un público expectante, se abrió el telón. El taller de danza clásica abrió con un fragmento de la obra Carmen, creada por el coreógrafo francés, ya fallecido, Roland Petit, con música de la ópera de Georges Bizet.
Salieron al escenario un conjunto de elegantes bailarinas con vestidos rojos, flores en el cabello y una larga trenza. Cuando terminaron, dejaron al público visiblemente emocionado y preparado para el resto de la función.
La siguiente interpretación fue la de la pieza Un mar de fueguitos, inspirada en el libro Patas arriba. La escuela del mundo al revés, del escritor uruguayo Eduardo Galeano.
Los bailarines entraban y salían rápidamente del escenario. Por momentos, la música se tornaba más lenta y la mayoría de los danzantes desaparecían del escenario, para posteriormente, al final de la pieza, volvió a registrarse el ajetreo de bailarines cruzándose, tocándose, bailando al unísono, intentando reflejar cuán diferentes podemos llegar a ser.
La última presentación estuvo a cargo de los estudiantes del taller “Cuerpo, danza e historia”, una adaptación de la película El baile, de Ettore Scola, un recorrido histórico a través de las distintas épocas que ha atravesado la danza. Pinturas de fondo, postes de luz en cada extremo y tiras de luces brillantes, adornaron el escenario. Los bailarines platicaron y bailaron al son del saxofón y los compases de unos danzones, entre otros géneros e instrumentos. Texto Katia Diéguez Foto Roberto Ornelas
Que articulo tan interesante, fue un evento hermoso.