En el marco de las actividades con que se conmemora el Día de la Tierra, la academia de Economía Social del ITESO realizó un Trueque Universitario el pasado 19 de abril 

Por José Carlos Mireles Prado y Josefina Robles Uribe

Noventa estudiantes de los grupos de la asignatura Economía Social, principalmente pertenecientes a las licenciaturas en Administración y Emprendimiento y Finanzas, así como a alumnos del PAP Economía Social y Solidaria, se reunieron el pasado 19 de abril, en el jardín de los Pinos para tomar parte del Trueque Universitario.  

Para preparar el evento, el profesor Luis Macías grabó un video con una breve explicación de lo que es el trueque, así como las instrucciones para participar en el mismo. En el video no sólo hablaba de las ventajas de esta actividad, sino que invitaba de forma abierta a los alumnos a disfrutar la experiencia del intercambio, dejando a un lado las ideas impuestas por el mercado, como el hecho de que, para satisfacer una necesidad, tienes que adquirir algo nuevo. Los alumnos tuvieron entre dos y tres semanas para preparar al menos 15 objetos para el intercambio, ya que mientras más sean los productos con los que se participe, la experiencia se vuelve más dinámica. 

El trueque es el intercambio de bienes y servicios de manera directa, sin la necesidad de dinero de por medio, y ese intercambio puede ser tanto de productos tanto nuevos como usados. Es una práctica que se ha dado en todo el mundo y desde hace mucho tiempo. En tiempos de crisis vuelve a emerger y retoma fuerza, ya que satisface necesidades básicas de la población, tal como pasó en Argentina, donde se organizaron más de cinco mil clubes de trueque durante y luego de la crisis de 2001. También es una práctica alternativa al consumismo, ya que se pueden conseguir artículos sin la necesidad de dinero; por lo tanto, promueve la cultura del reúso, del reciclaje y de la reparación. 

Para que exista trueque tiene que haber colaboración y acuerdo; entre más personas pongan cosas para intercambiar mejor se da. Puede ser difícil, porque la cultura del consumo va de la mano con la acumulación y nos es difícil desapegarnos de bienes materiales, aun cuando lleven arrumbados mucho tiempo o jamás les hayamos dado uso. 

Lo importante del trueque es revitalizar el uso de las cosas. Entre las reflexiones posteriores a la actividad realizada, un estudiante mencionó que, además los beneficios económicos que se alcanzan, se generan lazos sociales; como diría el economista Karl Polanyi, se vuelve a arraigar lo económico en lo social.  

El ejercicio transcurrió durante 90 minutos, con artículos muy variados: ropa, calzado, videojuegos, libros, alimentos, disfraces, accesorios, adornos, maquillaje, termos, muñecos de peluche, gorras, artículos deportivos, dulces, entre muchas otras cosas. Según la encuesta de salida, que respondieron 59 asistentes, se tuvo una oferta de casi 500 productos y se registraron 270 intercambios, muchos de ellos entre pares, pero también se lograron varios trueques multirrecíprocos, esto es, en los que participaron tres  o más personas con intereses comunes.  

Del total de participantes, sólo uno de ellos había participado previamente en un ejercicio de trueque, por lo que se trató de una experiencia nueva para todos los demás, y que tuvo muy buena recepción: al preguntarles sobre la evaluación del evento, el promedio de respuestas dio un 9.4 de satisfacción. Retomamos aquí algunos de los comentarios vertidos en la encuesta:

El ejercicio permitió a los alumnos participantes no sólo sorprenderse con los bienes que sus compañeros llevaron y experimentar los intercambios, sino que fue un espacio de convivencia, de diálogo y de desprendimiento, en el que encontraron satisfactores sin mediar dinero y sin dañar al planeta.

Nunca había participado en algo así; te das cuenta de que tienes muchas cosas sin usar, y puedo buscarles nuevos usos. 

La verdad yo no quería ir al trueque, si soy sincero. Me daba mucha flojera, y más por la falta de tiempo. Sin embargo, realmente me divertí bastante y pude convivir con muchas personas

Se trató de algo dinámico que nunca había hecho. 

Se me hizo interesante, ya que son actividades con la que comúnmente no estamos involucrados, así que es importante conocerlas. 

FOTO: Luis Ponciano