“La motivación de crear este libro fue el dolor del país; ver la sangre  nos mantiene con dolor, pero a la vez con esperanza”, dijo el jesuita Jorge Atilano, en la presentación del libro La reconstrucción del tejido social: una apuesta por la paz.

Los jesuitas Jorge Atilano y Gabriel Mendoza tomaron el profundo dolor que les provoca la actualidad mexicana y decidieron transformarlo en una obra que ofreciera algunas metodologías encaminadas a retomar el camino de la paz y la justicia.

Tejido social

El resultado es el libro La reconstrucción del tejido social: una apuesta por la paz, elaborado con la intención de transmitir un programa por la paz que ayude a comprender la necesidad social del buen convivir. Y llevarlo a la práctica.

Dicho libro fue presentado el 11 de mayo en el Auditorio D2 del ITESO por Jorge Alonso, del CIESAS Occidente, y Miguel Bazdresch, jefe del Centro de Aprendizaje en Red del ITESO, quienes comentaron algunos aspectos destacables de la investigación.

Afirmaron que la obra refleja un amplio estudio que indaga en las diversas formas en que se ha registrado la ruptura del tejido social en México. A través de la realización de 14 diagnósticos en 10 entidades federativas en contextos urbanos, semiurbanos o campesinos, en comunidades indígenas o en proyectos asediados por el gobierno, pudieron delinear diversas propuestas concretas para reconstruirlo.

Uno de los principales problemas que provoca la fragmentación social, a decir de los jesuitas, es la degradación que genera “un voraz capitalismo” que ha desatado una guerra contra la población y hasta contra la vida misma del planeta; la violencia e inseguridad que sufren México son consecuencia de estos conflictos.

Bazdresch expuso que otra de las causas que han alimentado la violencia es el individualismo.

“Con el intento de plantear la modernidad se ha hecho una ruptura social al querer dividir las instituciones en cuestiones de individualización; es decir, una ruptura de lo común. Al no tener una ética como referente común, nos dividimos y no logramos identificarnos”.

Una de las ventajas de esta investigación, según Alonso, es que expone detalladamente su metodología y es replicable, además de que hay una cuidadosa descripción de cada uno de los casos.

A la vez, los presentadores enumeraron algunas de las  propuestas que el libro propone para encontrar salidas al conflicto social.

Está por ejemplo el abandono del consumismo y la mercantilización; los intentos de practicar reconciliaciones familiares; el énfasis en una educación destinada al buen convivir; la búsqueda de significados comunes en relatos locales que vinculen a las personas con la comunidad y la naturaleza o insistir en la autonomía comunitaria.

“En este libro hablamos de una ruptura social, pero no de una muerte, por lo que creemos en su reconstrucción”, declaró Atilano, SJ.

Para Mendoza, SJ, este libro no es un proyecto concluido, sino una primera aproximación que necesita de otras miradas para seguir intentando comprender la realidad mexicana y su reconstrucción futura. Texto Marcela Gutiérrez Foto Archivo