José Morales Orozco, SJ, rector del ITESO, invitó a los alumnos que terminaron sus estudios de licenciatura a construir formas de convivencia más humanas.

Por Oficina de Comunicación Institucional ITESO

«Las esperanzas que en esta ceremonia ciframos en ustedes, trascienden las fantasías y las especulaciones para convertirse en compromisos concretos con la realidad». Con estas palabras, José Morales Orozco, SJ, rector del ITESO, se dirigió a los 844 alumnos que el pasado fin de semana celebraron su Ceremonia de Terminación de Estudios del periodo Otoño 2017.

Las ceremonias tuvieron como sede el auditorio Pedro Arrupe, SJ los días 8 y 9 de diciembre, y estuvieron marcadas, como cada vez, por el mismo denominador común: la alegría por cerrar un ciclo de vida en 31 carreras.

Ricardo Herrera, SJ, durante su homilía, luego de felicitar a los nuevos egresados de las ingenierías, señaló que la educación en esta casa de estudios está orientada «a que hagan su trabajo fuera de la universidad y lo hagan al estilo ITESO. Es decir, con sentido social, esto quiere decir que, si su emprendimiento va a producir más pobreza, entonces no lo hagan. El estilo ITESO también implica reconocer la belleza del mundo, promuevan esa belleza donde estén».

Sara Gabriela Canales, egresada de Ingeniería Industrial, habló en nombre de los 184 egresados y egresadas de las diferentes ingenierías. Dijo que en el ITESO «aprendimos a ser responsables, a ordenar prioridades. Sí, tuvimos momentos difíciles, pero valió la pena. Más que una carrera, nos dieron sensibilidad y el compromiso por servir, por marcar diferencia para los demás y buscar el bien común».

José Morales Orozco, SJ, rector del ITESO, invitó a los egresados a «que su actuación como profesionales genere muchas esperanzas en ustedes, en sus familias y en nuestra patria».

Para lograrlo, los invitó a realizar tres tareas: «la primera, enraizarnos en la gratitud, abrirnos a la alegría y suscitar generosidad; la segunda, realizar un servicio de justicia y de paz, en otras palabras, construir formas de convivencia más humanas, y la tercera, alentar la sustentabilidad en su ejercicio profesional».

Carlos Ordóñez, padrino de la generación de Ingeniería en Sistemas Computacionales, invitó a los recién egresados a «encontrar el amor, porque de lo que te enamoras atrapa tu imaginación, te enamoras de los que eres. Descubran la mejor manera de ayudar y no se les olvide: en todo amar y servir».

Andrea Montserrat Romero, egresada de la Licenciatura en Derecho, expresó que «no hay mensaje universal que pueda conmover a cada uno de ustedes, porque cada historia y cada recorrido ha sido único e inigualable. Sus obstáculos, logros y sus éxitos son incomparables».

Los discursos de estudiantes en las ceremonias de terminación de estudios estuvieron llenos de agradecimientos a sus familias, amigos y amigas que se desvelaron con ellos, al profesorado que dio algún consejo que iba más allá de su materia, al personal de mantenimiento que permitió que disfrutaran de los jardines y áreas del campus para hacer del ITESO su segunda casa.

También hubo momentos de reflexión sobre la situación del país y la importancia del compromiso social.

Durante la homilía ofrecida en gratitud de la generación de Arquitectura, Diseño e Ingeniería Civil, David Velasco, SJ invitó a las egresadas y egresados a comprometer su acción profesional en buscar cerrar brechas de desigualdad y construir paces en el contexto de violencia que vivimos en el país.

 

«¿Cómo concebir un mundo donde se construya por la humanidad, no por lo material? Yo les invito a que soñemos en el diseño y en la construcción de una casa común donde nos enorgullezcamos de ser humanos y que dentro de este clima de violencia y de desigualdad busquemos cerrar la brecha y construyamos paz», exhortó el jesuita.

«Nuestra participación en el ITESO va más allá de simples teorías o fórmulas. Aprendimos a ser personas, más que solo profesionistas. Ahora formamos parte de un legado; representamos tanto a la institución como a todos los estudiantes y egresados de nuestra alma mater. Seamos los mejores del mundo y para el mundo», dijo Andrea Montserrat Romero.